El jueves 29 de febrero, Valentina Arnáiz salió por la tarde de su casa para hacer un recado en una cochera cercana a su vivienda. Desde entonces, ningún familiar o conocido ha vuelto a verla y la Guardia Civil continúa, un mes más tarde, con ... la búsqueda de esta mujer desaparecida en la localidad burgalesa de Pinilla de los Moros.
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Mide 1,70 y pesa 50 kilogramos. Cuando desapareció, Tina vestía pantalón de chándal negro, un abrigo con capucha de color granate y botas marrones. Su búsqueda empezó el viernes 1 de marzo, cuando la Guardia Civil comenzó a realizar batidas por tierra en Pinilla y los alrededores del río Pedroso, que pasa por la localidad.
Un día más tarde, el sábado 2 de marzo, al lugar acudían los GEAS, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil, venidos desde Logroño. Días más tarde, a los dispositivos de búsqueda se unían un helicóptero y varios drones para continuar con la búsqueda de Valentina, cuyo 63 cumpleaños fue el 4 de marzo.
Vecinos de Pinilla de los Moros organizaron batidas por los alrededores del municipio en busca de la desaparecida. Además, también han participado durante este mes la Unidad Canina de Salvamento de Burgos, GREM, voluntarios de Protección Civil de Aranda de Duero y varios efectivos de Cruz Roja de diferentes puntos de la provincia en la búsqueda de Valentina.
Poco después de comenzar la búsqueda de Tina, otro varón desaparecía en la provincia de Burgos el lunes 4 de marzo. Se trataba de J. L. S. R., de 63 años. A él se le vio por última vez en la localidad de Villahoz.
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Durante tres semanas, los efectivos de la Guardia Civil compaginaron ambas búsquedas, duplicando sus esfuerzos. Finalmente, el cuerpo sin vida de este varón apareció el pasado 25 de marzo en el cauce del río Arlanza.
Tina desapareció en la localidad burgalesa de Pinilla de los Moros hace un mes, pero la Guardia Civil continúa con su búsqueda. Sobre todo, centra su operativo en los alrededores del río Pedroso, donde varias patrullas trabajan mañana y tarde buscando por las orillas.
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Asimismo, los agentes están utilizando drones para la búsqueda de la mujer de 63 años y efectivos de Cruz Roja estuvieron en la zona colaborando con ellos el jueves 28 de marzo. Además, los GEAS volverán a actuar en la zona a partir del lunes 1 de abril. Este grupo especializado suele trabajar con lanchas aunque, debido a la dificultad que presenta el río por sus torrentes, se van sumergiendo uno a uno y palpando en la superficie, según explica la Guardia Civil.
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A pesar de la virulencia del agua y del alto caudal del río Pedroso durante estos días, la Guardia Civil continúa con la búsqueda de Tina en la localidad burgalesa. Por el momento, no se descarta ninguna hipótesis respecto a su desaparición.
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Durante el mes de marzo ha habido varios periodos de mucho frío, viento y lluvias. Estas últimas han dificultado las búsquedas de Tina y J. L., ya que han causado que los cauces del río Pedroso y el del Arlanza hayan sido más abundantes de lo normal, siendo «complicadas y peligrosas» las labores de búsqueda en determinados momentos.
La llegada de la borrasca Nelson ha traído más rachas de viento y lluvias a la provincia de Burgos, por lo tanto, se espera que el caudal de los ríos aumente y baje con más virulencia en los próximos días. Sin embargo, la Guardia Civil, acompañada de los GEAS, continuará sin cesar sus labores de búsqueda para hallar con la desaparecida.
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