Las lluvias se agarran a Burgos y dejan 45 litros por metro cuadrado en una semana

El mes arrancó sin variar la tendencia, es decir, sin lluvias. Sin embargo, a última hora de la tarde del pasado domingo, el agua empezó a caer en la capital. Y, desde entonces, ha estado lloviendo. Unos días más que otros, ciertamente, pero eso ha permitido acumular los 45 litros por metro cuadrado que se han registrado hasta este domingo.

Según los datos de la AEMET, entre el domingo y el lunes, la estación meteorológica de la capital, ubicada en el Aeropuerto de Burgos, recogió 5,8 litros por metro cuadrado. El martes se pasó sin lluvias y con una máxima por encima de los 25 grados, pero las precipitaciones volvieron el miércoles, con 4,4 litros. Y ya el jueves se recogieron 21,6 litros, la mayor cantidad de la semana.

Más lluvias el viernes, con 12,2 litros, y el sábado, 0,8. Todo ello unido a los 1,4 litros que se recogieron el 9 de octubre hace que las precipitaciones del mes superen ya los 46 litros por metro cuadrado. Y quedan por sumar las lluvias del domingo. Aún así, están por debajo de la media habitual, que se sitúa en los 60 litros, pero ya son mucho más de lo que se ha registrado en los últimos meses, pues desde abril no llueve en condiciones en Burgos.

La previsión de la AEMET habla de que, para la próxima semana, seguirá habiendo lluvias, con una nueva subida de las temperaturas, que incluso volverán a rondar los 25 grados el jueves. Si sigue lloviendo es posible que se consigan alcanzar esos 60 litros por metro cuadrao. Aun así, este octubre no ha sido el más seco del histórico más reciente.

Los 13,2 litros de 2017 y los 15,2 litros de 2018 están a la cabeza en la última década. En el extremo contrario destacan los 85,2 litros que cayeron en octubre de 2020. Y si la media habitual son 60 litros, la AEMET tiene también los registros de mayor y menor lluvia para un octubre. El de 1960 fue el más lluvioso de la serie histórica, con 174 litros, mientras que el de 1983 fue el menor, con 1,7 litros.

En lo que llevamos de año, la estación meteorológica de Burgos capital ha recogido 252 litros por metro cuadrado, la mitad de lo que se debería registrar para un año normal. Enero y febrero fueron meses de escasísimas lluvias, solo 18,8 y 7,6 litros, respectivamente. Marzo y abril llegaron con niveles superiores a la media, en torno a los 65 litros, pero a partir de ahí empezó a dejar de llover.

En mayo se recogieron únicamente 23,4 litros, frente a los 63 de media habitual. En junio cayeron hasta los 5 litros, y en julio solo fueron 1,2. Subió algo en agosto, que retornó ligeramente a valores normales con 23,6 litros. Pero llegó septiembre, muy caluroso y seco con esos 3,4 litros. Mucho tiene que cambiar en los dos últimos meses del año para revertir esta drástica sequía en Burgos.

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