La exabadesa de Belorado augura la quiebra de los monasterio de Derio y Orduña

Por sorpresa y a media noche, la exabadesa del convento de La Bretonera de Belorado, Laura García de Viedma, se ha grabado un video en Instagram en el que ha culpado al arzobispo de Burgos, Mario Iceta, de «hundir» los dos monasterios, Derio y Orduña. Así se ha manifestado la exabadesa de las ya exmonjas de Belorado, en Burgos. «Literalmente, dentro de nada, si Dios no lo impide, yo creo que ya para septiembre estarán arruinados, si no embargados y si no vendidos a los bancos» ha augurado.

La primera idea que manejó la lideresa es que «Mario Iceta buscaba arruinarnos y se ha confirmado esa idea», ha confesado. Y se pregunta «cuáles son las intenciones» del prelado burgalés y de la comisión con ellas. Su situación es complicada, la campaña de mecenazgo que iniciaron concluyó con poco éxito.

García de Viedma ha asegurado que le están llegando «apremios de Hacienda» sobre los monasterios de Derio y Orduña por impagos y que no tienen «nada» para subsistir. De hecho, este miércoles, les ha llegado la comunicación de que la cuenta de Ibercaja «está embargada». Y la preocupación por los aprietos en los que le pueda poner a la lideresa Hacienda, le «preocupa mucho».

Por no tener, hasta su vehículo carece de seguro, ni tienen «modo de pagar la gasolina de los coches». Tampoco tienen ya seguros de responsabilidad civil.

Ha apuntado que lo único que están pagando desde la Comisión Pontificia es la luz, pero no les han dado «nada para alimentación, ni de las mayores ni las demás, no tenemos absolutamente nada». Y ha recordado que ahora dependen de lo que les dan, «de lo que personas que se acercan bondadosamente nos ayudan; y a veces nos traen algunos alimentos». De hecho, han acusado a Iceta de que tiene prisa por desahuciarlas.

Una situación que ha sido «generada por don Mario Iceta, que está llegando a un extremo muy, muy fuerte y yo quiero que lo sepan esas personas a las que me dirijo desde la fraternidad, desde la hermandad y desde el sentido de la verdad».

Por fin, García de Viedma ha reconocido que existe una comunidad al margen de las diez excomulgadas, «ancianas dependientes» a las que tampoco les llega la ayuda de Iceta.

La comunidad de excomulgadas tiene mucho trabajo. Más allá de los oficios propios que desarrollan en el convento de Belorado, «las hermanas tuvieron que hacerse más presentes en las otras comunidades, puede ser que eso nos haya ayudado», reconoce. Es más, también ha reconocido que tienen vigilados los conventos de Derio y Orduña. Que han colocado testigos para saber quién merodea por allá y lo pueden demostrar.

Ha asegurado que hay empleados y personal de servicio del monasterio que lleva «sin cobrar desde abril y terminarán por pedir el finiquito».

Laura García de Viedma ha pedido «ayuda de cercanía», ya que su comunidad de excomulgadas va de fracaso financiero en fracaso financiero, se centra en lo cercano «y en la comprensión».

Sabe que carece del apoyo mediático, salvo algunos canales de sedevacantistas que las apoyan. Ahí tienen abierta una ventana porque, tengan o dejen de tener razón, esos canales de Youtube son de sedevacantistas como ellas y entre todos se retroalimentan como se puede comprobar en la última entrevista ofrecida a Macabeo.

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