Las exmonjas de Belorado dicen que Mario Iceta tiene prisa por desahuciarlas

Han vuelto a hablar las ya exmonjas de la Bretonera de Belorado. Lo han hecho a un canal de Youtube denominado Macabeo que dirige un sedevacantista como ellas. Esta vez no ha sido Laura García de Viedma. Han sido las exmonjas Israel y Sión, o lo que es lo mismo, Isabel Jiménez y Susana Mateo.

Han dado por sentado que serán desahuciadas del convento pronto porque [el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, y la Comisión] «tienen prisa, si nos pueden excomulgar en tres días no lo van a hacer en cuatro y si nos pueden desahuciar en tres o cinco meses no lo van a hacer en cinco años».

Todo radica en un 'motu proprio' del Vaticano y el Derecho Canónico y el Derecho Civil. Al parecer, explican, en ese motu proprio que Roma se arrogaba cualquier derecho sobre las propiedades; y «que el Papa es el propietario de los inmuebles y efectivos», apuntaba Susana Mateo, «y que las comunidades son meras administradoras». Ese motu fue publicado «solo en italiano, pero fue distribuido a todos los notarios para no efectuar contratos de compra venta sin la licencia de Roma».

En el caso de Belorado, demuestran mucha confusión en cuanto a los términos propiedad y posesión. Si la comunidad es «mera administradora, según la norma vaticana, pese a que la posesión del convento esté registrada a nombre de las Clarisas de Belorado, su propiedad no es de ellas.

A eso Susana Mateo dice la persona jurídica de Monasterio de Santa Clara es la que figura en el Registro «pero a nosotras nos excluyen de la persona jurídica» cuando son personas físicas ajenas a la jurídica, que es un instrumento con entidad propia.

En el caos mental de las exreligiosas, Mateo ha llegado a reconocer que ellas dependen «del Papa», eso sí, ha apuntillado Jiménez que siguen siendo «autónomas» para acabar diciendo, buscando justificar algo que es posible que no estuvieran autorizadas a decir, que, en la aplicación de decreto del Vaticano, «todo es confusión».

Y concluir que, con un argumento que no se ajusta a la realidad, que el Derecho Canónico es subsidiario del Derecho Civil, porque para ellas, no hay que aplicar el código de la Iglesia, sino el derecho positivo general y como el Registro de la Propiedad dice que es de la Comunidad, no han de aplicarse las de la Iglesia de la que ellas ya no forman parte.

También han echado en cara a Iceta que delegue en una Comisión «sinodal» su falta de acercamiento a ellas y al diálogo y que haga alarde de sus decisiones haciendo «una muestra mediática y escarnio público».

Aseguraba Isabel Jiménez que entre ellas comentan que parece que están «buscando hacer el mayor escarnio público», no va ya a ser que «a alguien se le ocurra» seguir sus pasos.

Y para enredar más el asunto, han denunciado en el canal que «en Orduña y Derio» les han intentado «cambiar las cerraduras». Y ante el «morbo de Herodes [supuestamente Iceta y el Vaticano], silencio», dice Isabel Jiménez.

El reclamo desde hace años, a las dos diócesis, Burgos y Vitoria, era «tener una asistencia espiritual acorde» con su pensamiento preconciliar y que «creyera lo que celebrara», aseguraba Israel Jiménez.

Susana Mateo ha confesado que lo ocurrido el 13 de mayo no empieza ese día, «sino mucho antes. Esto no empieza el 13 de mayo y ya se habían escuchado cosas por la Diócesis rumores…».

Ha apuntado que quisieron hablar con el Dicasterio, con el obispo de Vitoria y con en el de Burgos y terminaron por escribir sus problemas y acabaron en su obispo «esto se mueve raro» pero no obtuvieron ayuda.

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