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La cocaína y el alcohol son las sustancias más consumidas por aquellas personas que acuden a desintoxicarse en Burgos. Así lo refleja la memoria anual de Proyecto Hombre en la provincia, en la que se evidencia un aumento de usuarios en el año 2023 respecto a los cuatro años anteriores con 977 personas en tratamiento, 2.352 personas en prevención y 614 familiares de drogodependientes.
Entre los adultos se mantiene la tendencia de la cocaína como sustancia principal en motivo de demanda entre adultos que acuden al programa, droga que supone el 46,63%, y también el alcohol, que constituye el 15,54% del total. Desde Proyecto Hombre señalan también la tendencia al poli consumo (sobre todo, cocaína y alcohol) y el juego patológico.
A la cocaína y al alcohol le sigue la heroína, que desde el 2021 mantiene una tendencia a la baja con respecto al alcohol cayendo al tercer puesto. Las anfetaminas ocupan el cuarto lugar, cerca del 10%, entre las adicciones de las personas mayores de 21 años que acuden a Proyecto Hombre y el cannabis le sigue sin llegar al 10%. El juego patológico ocupa el último lugar en la estadística, en torno a un 5%.
La entidad explica que el caso del alcohol es más complejo que el resto porque «las personas suelen tardar más tiempo en pedir ayuda porque se trata de un consumo más normalizado. Es una sustancia socialmente aceptada, por lo que la persona con problemas de adicción tarda más años en presentar severidad, solicitar asistencia y su adicción se cronifica».
Por sexos predominan los hombres en tratamiento de adultos, que son el 86% frente a un 14% de mujeres.
Proyecto Joven se centra en los menores de 21 años que necesitan ayuda por motivos de drogadicción y también por otros motivos como por ejemplo de conducta. Los jóvenes atendidas en este programa de prevención de Proyecto Hombre Burgos en 2023 fueron un total de 310 usuarios, 456 familiares, 2352 personas en actividades de prevención sumando un total de 3.118 menores de 21 años atendidos.
Las sustancias principales, motivo de demanda en menores de 21 años, son el cannabis, que alcanza el 63,22%, y alcohol que supone un 36,78% del total. La marihuana cae respecto al año 2022, cuando consituyó el 86,15% de las peticiones del programa para jóvenes. De esta forma, 2023 refleja la cifra más baja desde 2018. Sin embargo, el alcohol aumenta significativamente pasando del 13,85% de 2022 al 36,78% en 2023.
En él área de prevención sin sustancias, se observa un aumento de problemas de conducta (53,33%) relacionados con violencia y agresividad fundamentalmente, y el uso de las TRICs (teconologías) (22,67%). Otros motivos de demanda son problemas familiares (17,33%) y escolares (6,67%).
Además, Proyecto Hombre informa de que en 2023 se han dado 282 altas terapéuticas, lo que equivale a que 24 personas al mes mantienen un estilo de vida saludable una vez realizado el tratamiento en alguno de los programas que la entidad ofrece.
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