Cinco rutas para conocer Burgos a la europea

Burgos no tiene desperdicio a la hora de realizar este tipo de viaje, ya que cuenta con espacios naturales y pueblos encantadores más allá de la capital. La zona norte de la provincia varía respecto al sur, ya que recuerda a los paisajes cántabros repletos de montaña y vegetación. En ese sentido, destaca Las Merindades, donde se encuentran Ojo Guareña, encantadores pueblos y los Cañones y Hoces del alto Ebro y Rudrón.

A menos de una hora y media desde Burgos está el Monumento Natural de Ojo Guareña. Este paraje natural destaca por la multitud de cuevas y los santuarios prehistóricos, por lo que es el lugar idóneo para los amantes de la espeleología. Sin embargo, también es un plan apto para inexpertos, por ejemplo, para desconectar en la naturaleza y disfrutar del contraste entre el verde y las zonas rocosas de las montañas.

Entre las diferentes rutas de senderismo, la mayoría tienen forma de círculo que cualquiera puede realizar, incluso niños. Algún ejemplo es el camino de Noceda o de El Ventanón. Además, cuenta con una curiosa ermita en el interior de una cueva, conocida como San Bernabé.

El paraje se puede admirar desde los miradores de Alto de la Concha o Alto de Retuerta, perfectos para disfrutar de la puesta del sol. Allí hay un aparcamiento y cerca un área de autocarvanas, concretamente en Medina de Pomar, considerado uno de los municipios más bonitos de Burgos.

Al sur de Ojo Guareña, se encuentra uno de los pueblos más famosos por sus cascadas y formaciones rocosas en forma de camellos: Orbaneja del Castillo. Además, una parada que merece la pena entre Orbaneja y Ojo Guareña es la zona de las ruinas del Castillo de Arreba, que forman parte de otra ruta de senderismo.

Otro espacio natural impresionante en la provincia es el enclave de Cañones y Hoces del alto Ebro y Rudrón. El mirador del Cañón del Ebro es el más conocido en el que se contempla toda la zona desde lo más alto. Un punto de partida interesante es la localidad de Valdealteja por el Cañón del Ebro. También se puede subir al Alto Rudrón, por la senda paralela al río.

Una de las cuevas submarinas más profundas de España es el Pozo Azul, un acúifero azul turquesa ubicado bajo una montaña. Se encuentra en Covanera, siguiendo la dirección sur hacia la ciudad de Burgos. De hecho, la mayoría todavía está sin explorar.

Respecto a las rutas en la zona sur de Burgos, es imprescindible pasar por la cuna de Castilla: Covarrubias. Este título se debe a la relación que guarda con la nobleza medieval, visible en la Colegiata de San Cosme y San Damián, así como en la Iglesia de Santo Tomás.

Curiosamente, Covarrubias está unida a Noruega a través del monumento a la princesa Kristina, quien contrajo matrimonio con Don Felipe, hermano de Alfonso X el Sabio, en el siglo XIII. La ermita de San Olav, patrón noruego, también se debe a esta relación.

Al sur de la provincia Cañón de Río Lobos es otro espacio natural que comparte territorio con Soria. Cuenta con dos castillos, el de Ucero y el de San Lonardo de Yagüe Existen varias rutas con diferentes duraciones y dificultades a tener en cuenta entre las que destacan la senda del Cañón, la senda de los Árboles y la senda de las Piedras. En el corazón del cañón se ubica la ermita de Santa María.

Para finalizar, siempre se pueden recorrer las bodegas y las viñas que dan lugar al vino de Denominación de Origen (DO), pero no sin pasar por la villa Santo Domingo de Silos y el desfiladero La Yecla. Tampoco está de más conocer los cinco museos únicos que te puedes encontrar en la provincia de Burgos. De esta manera, se puede conocer en profundidad el encanto de la provincia de norte a sur o viceversa.