Estado del terreno en el incendio de Quintanilla del Coco. GABRIEL DE LA IGLESIA

Burgos cierra un verano idóneo para los incendios: calor, sequía, viento y tormentas

La temperatura media en la provincia ha sido 2,4 grados superior a la media histórica. Además, Burgos presenta un déficit hídrico del 66 por ciento al final del verano

Martes, 20 de septiembre 2022, 13:58

La provincia de Burgos cierra este viernes 23 de septiembre a las 3.04 horas un verano con unas condiciones idóneas para los incendios forestales. Se han batido récords históricos en cuanto a elevadas temperaturas en este verano del 2022 con muy pocas precipitaciones. Por ... lo tanto, el verano ha dejado poca humedad ambiental. Además, ha habido rachas de viento fuertes y muy cambiantes. También se ha registrado un número inusual de días de tormenta, aunque el número de rayos ha sido menor que en otros años.

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Para Virginia Barcones, delegada del Gobierno en Castilla y León, esto es una evidencia de que «el cambio climático está aquí, con consecuencias y exige medidas de refuerzo para afrontar retos difíciles y traumáticos», ha afirmado Barcones. El incendio de Quintanilla del Coco en la provincia de Burgos es un ejemplo de lo devastadores que se han vuelto los fuegos debido a estas condiciones. «Los incendios forestales son fruto de todas estas condiciones. Es innegable el cambio climático, los datos objetivos así lo ponen de manifiesto», ha señalado Barcones.

La delegada del Gobierno también ha resaltado la labor de la Aemet durante las jornadas de incendios. El organismo ha emitido boletines zonales para las comarcas donde se estaba luchando contra el fuego. Esta información era importante para la toma de decisiones por parte de los medios de extinción.

El verano burgalés del 2022 ha sido extremadamente cálido, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). La temperatura media de esta estación ha sido de 20,9 grados, lo que supone que ha sido 2,4 grados superior al promedio 1981-2010. A diferencia del resto de provincias de Castilla y León, Burgos ha sido la única provincia de Castilla y León que ha resistido a dar la máxima histórica este verano. Fue el estío de 2003 el más caluroso de la serie histórica con 21,8 grados de media, 3,3 grados por encima del promedio 1981-2010.

Burgos ha sufrido dos episodios de olas de calor a lo largo de 13 días en total, del 14 al 18 de junio y del 11 al 18 de julio, con un umbral de 34 grados.

Precipitaciones

La provincia de Burgos ha acumulado 30 litros por metro cuadrado en el trimestre de junio, julio y agosto, lo que supone una diferencia de 57 litros por metro cuadrado menos que en el promedio 1981-2010. Según los datos de la Aemet, la provincia presenta un déficit hídrico del 66 por ciento con respecto a los datos que serían normales.

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Desde 2008, este también ha sido el verano con más tormentas de Castilla y León, en cambio es uno de los tres con menos precipitaciones. La Aemet destaca el número de días total de tormenta, con un valor de 77, si bien el número de rayos es inferior a años anteriores y con una precipitación total inferior a la media.

Avance de los climas áridos

La delegada del Gobierno ha aprovechado su comparecencia para incidir en que «es un hecho constatado que las emisiones de gases de efecto invernadero están provocando un aumento global de las temperaturas. En España, ese calentamiento se estima en alrededor de 1,4 grados desde los años 50 del siglo XX. Aunque la variabilidad espacial y temporal en lo que a lluvias se refiere es muy grande, en el conjunto del país las precipitaciones han disminuido alrededor de un 12 por ciento en el mismo período».

Para Barcones «ese claro incremento de las temperaturas y ligera disminución de las lluvias se ha traducido en una extensión en nuestro país de los climas áridos. Se estima que, desde mediados del siglo XX, los climas de tipo árido han duplicado su extensión en España, avanzando a un ritmo de más de 1.500 km² al año y esto significa que, cada cinco años, una extensión equivalente a la de la provincia de Palencia adquiere un clima árido en nuestro país, en detrimento de los climas templados».

Efemérides

En el mes de junio, Aranda de Duero registró una temperatura máxima de 39,9 grados. Igualmente, Santa Gadea del Alfoz registró una temperatura máxima de 35,2 grados y una temperatura máxima dentro de las mínimas de 18,7.

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La temperatura más alta para el mes de julio en la provincia era de 38 grados en 2020. El día 18 de julio se superó en la provincia hasta alcanzar los 39,3 grados.

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