Burgos cierra el primer semestre de 2023 con siete muertos en las carreteras

Este es el año con más fallecidos en el primer semestre del año de los últimos cinco. En 2019 se registraron cuatro muertes en carretera, mientras que en 2020 y 2022 fueron seis. En 2021 los fallecidos por un accidente vial en estas fechas ascendían a cinco.

Las víctimas que han fallecido en este periodo han sido seis conductores y un pasajero. Además, por tipo de vehículo, tres circulaban en motocicletas y cuatro en turismo. Los accidentes se han producido principalmente por colisiones y salidas de vía y las causas que los han provocado han sido fundamentalmente distracciones, velocidad inadecuada y alcohol y otras drogas.

Todos los accidentes se han registrado en vías convencionales (dos en N-120; uno en N-1, uno en CL-629, uno en BU-552 y otro en BU-P-8012) además de un camino convencional cercano a Castrovido. En cuanto a los meses con más siniestros, enero y mayo han registrado dos accidentes mortales cada uno, mientras que los otros tres se produjeron en marzo, abril y mayo.

En mayo se produjo, además, otro accidente que en principio se registró como un accidente mortal en la N-234 en Revillarruz, sin embargo la DGT rectificó tras conocer que la persona fallecida lo hizo a consecuencia de un problema de salud que provocó el accidente y no como consecuencia del propio accidente.

En cuanto al género de las personas que han perdido la vida en estos siniestros, seis eran varones y la persona restante era una mujer.

El primero de estos accidentes tuvo lugar al empezar el año, el 2 de enero, en la N-120 en Fresneña. El accidente entre un tractor y un vehículo dejó un muerto y dos heridos después de que el turismo alcanzara al tractor. A consecuencia del impacto falleció el conductor del coche, su acompañante resultó herido grave y el conductor del tractor herido leve.

Una semana después la misma vía, la N-120, registró otra muerte. El siniestro se produjo en el kilómetro 104, a la altura de San Medel. Un varón de 78 años murió después de que el turismo que conducía invadiera el carril contrario y colisionara contra el vehículo articulado que venía de frente. El turismo, un Nissan Micra, se salió de la vía y el camión quedó cruzado en la nacional.

El tercer siniestro mortal se produjo el 16 de marzo en Aranda de Duero. Un hombre de 67 años falleció después de sufrir un accidente de moto. El accidente tuvo lugar en el kilómetro 155 de la N-IA, a la altura de la báscula, donde el alertante indicó a emergencias que se habían encontrado al motorista en el suelo.

La cuarta víctima mortal también fue un motorista. El accidente se produjo al filo de la medianoche del 17 de abril en Villarcayo, en la CL-629, en el kilómetro 69. La llamada a la sala de emergencias del 1-1-2 de Castilla y León alertaba de una motocicleta en la vía, pero no había rastro del motorista. Más tarde dieron con el cuerpo del varón, de unos 50 años, que estaba inconsciente pero vivo. Hasta el lugar de los hechos se desplazó una UVI Móvil de Sacyl y el equipo médico de Villarcayo, pero no pudieron hacer nada por salvar la vida del hombre que finalmente acabó falleciendo.

La quinta persona muerta se produjo en el accidente del 19 de mayo. Una mujer de 79 años murió tras una colisión frontolateral entre dos vehículos en la carretera BU-552, en el municipio burgalés de Valle de Losa, en el punto kilométrico 24, en el cruce que da acceso a Villabasil. Inicialmente se solicitó asistencia sanitaria para tres heridos, uno de los cuales estaba atrapado en el interior de uno de los turismos e inconsciente. A su llegada, los sanitarios solo pudieron confirmar el fallecimiento de la mujer, mientras que atendieron a otros tres heridos.

Otro motorista murió el 27 de mayo en la BU-P-8012 a la altura del pueblo burgalés de Torrelara. Un ciclista que circulaba por esa vía fue quien avisó de que se había encontrado con un motorista que había sufrido un accidente y el hombre se encontraba tirado en la carretera. El personal sanitario desplazado hasta el lugar solo pudo confirmar su fallecimiento en lo que parecía una salida de vía.

El último de los fallecidos fue también un varón, en esta ocasión de 47 años, que perdió la vida en un camino en las proximidades de la localidad de Castrovido. Allí se ha registró una colisión entre un camión y un todoterreno cuando ambos vehículos circulaban cuesta arriba por un camino situado tras la iglesia de San Martín. Por motivos que se desconocen, el camión volcó sobre el habitáculo del conductor, que quedó atrapado e inconsciente. Los servicios de emergencias desplazados al lugar del siniestro no pudieron hacer nada por salvar su vida.

El pasado miércoles 12 de julio se ha registrado el primer fallecido del segundo semestre de 2023 en las carreteras de Burgos. Un conductor de 25 años y vecino de Medina de Pomar perdió la vida en una colisión frontal entre un turismo y una furgoneta en Espinosa de los Monteros.

El siniestro tuvo lugar en el kilómetro 4 de la BU-542, a la altura de la citada localidad de Burgos, el conductor del turismo quedó atrapado e inconsciente en el vehículo y los servicios médicos no pudieron hacer nada por salvar su vida.