Borrar
Las diez noticias imprescindibles de Burgos este lunes 20 de enero
Imagen del último tramo de la A-73 en entrar en servicio. GIT
Burgos acumula 130 kilómetros de autovía pendientes de desarrollar

Burgos acumula 130 kilómetros de autovía pendientes de desarrollar

La ejecución de la A-73, la A-12 y la A-11 acumula años de retraso. Sólo están en servicio tres tramos, y uno más en obras, de los 13 previstos en conjunto

Domingo, 16 de abril 2023, 09:03

La reciente apertura de plicas del concurso de adjudicación de las obras del tramo de la A-73 entre Quintanaortuño y Montorio ha supuesto una buena noticia para el desarrollo de las infraestructuras pendientes en la provincia de Burgos. Sin embargo, el paso dado ... por el Ministerio de Transportes, que abre la puerta al posible inicio efectivo de las obras a partir de este verano, se antoja totalmente insuficiente como para dar respuesta a los ingentes retrasos acumulados en la ejecución de los numerosos tramos de autovías aún por desarrollar en Burgos.

Y es que, ahora mismo está pendiente la ejecución de algo más de 130 kilómetros de carreteras de alta capacidad en la provincia, repartidos en varios tramos de la A-73, la A-12 y la A-11 que acumulan años de retraso a pesar de estar planificados -y anunciados- hace más de una década. La paralización de proyectos por parte del Ministerio tras la crisis de 2008, varios cambios de criterios y diferentes problemas con las adjudicatarias han lastrado su desarrollo definitivo y, en el mejor de los casos, habrá que esperar aún muchos años para ver culminadas las obras de todos los tramos pendientes.

La autovía que mayor avance presenta ahora mismo es la A-73, que a estas alturas de la película ya debería conectar Burgos con Aguilar de Campoo. Lejos de ello, ahora mismo sólo están operativos dos tramos. El primero de ellos se puso en servicio en 2013, uniendo la circunvalación de Burgos con Quintanaortuño. La inauguración del segundo (Pedrosa de Valdelucio – Báscones de Valdivia) tuvo que esperar hasta octubre de 2021 para ser una realidad. Entre ambos tramos, desconectados entre sí, apenas suman 20,7 de los 71 kilómetros planificados inicialmente para toda la autovía.

Así, todavía están pendientes los cuatro tramos restantes. El que mayor avance presenta es precisamente el ubicado entre Quintanaortuño y Montorio, de 11,6 kilómetros de longitud, que ahora mismo está pendiente de adjudicación y cuyas obras, licitadas en 126,7 millones de euros, podrían arrancar a finales de este verano si nada se tuerce. En principio, la licitación se planteó con un plazo de ejecución de 36 meses.

Mayor retraso en su tramtiación presentan los otros tres tramos pendientes. El de Montorio – Santa Cruz del Tozo (17,1 kilómetros), el de Santa Cruz del Tozo -Pedrosa de Valdelucio (14,3 kilómetros) y el de Báscones de Valdivia -Aguilar de Campoo (5,7 kilómetros en terreno palentino) aún están pendientes de licitar.

A la vista de los retrasos acumulados, el exministro Íñigo de la Serna, anunció en 2018 la intención de lanzar la ejecución de todos los tramos pendientes a través de un único contrato bajo la figura de la concesión. Sin embargo, apenas unas semanas después se materializó la moción de censura del PSOE y, con el cambio de Gobierno, aquel plan decayó.

Pendientes de la A-11

Menos avance aún presenta la A-11. En este caso, sólo están operativos 13,7 de los 53 kilómetros de autovía planificados en la provincia de Burgos, correspondientes a la variante de Aranda de Duero, inaugurada en 2015 tras una inversión de 68,6 millones de euros. Así pues, quedan pendientes otros 40 kilómetros de autovía en territorio burgalés, divididos en dos tramos. El primero, que debería unir la variante de Aranda con Langa de Duero (22,3 kilómetros), ya cuenta con proyecto, pero se está a la espera de su correspondiente licitación.

Habrá que ver si, tal y como aseguró semanas atrás la ministra de Transportes, Raquel González, dicha licitación, planteada en 166,8 millones de euros, se publica este verano. También está pendiente el tramo entre la variante de Aranda y el límite provincial con Valladolid. Y en este caso, la tramitación va para largo. No en vano, ya se cuenta con proyecto, pero el trazado, de más de 40 kilómetros (alrededor de 17 en Burgos y el resto en Valladolid) ha generado muchos problemas.

Proyectos caducados en la A-12

Pero quizá, el caso más sangrante es el correspondiente a la A-12, llamada a sustituir a la N-120, una de las carreteras con mayor siniestralidad de la provincia. En este caso, los avances en Burgos son prácticamente nulos, mientras que la práctica totalidad de los tramos riojanos están en servicio desde hace años.

Así, el único tramo en obras ahora mismo es precisamente el situado en el límite provincial, entre Santo Domingo de la Calzada y la localidad burgalesa de Villamayor del Río. Y los trabajos, adjudicados en su día en 84,2 millones de euros, acumulan ya varios meses de retraso. Actualmente, la obra está ejecutada a un 50 % aproximadamente, y las previsiones indican que no se culminará hasta bien entrado el 2024.

Mucho más habrá que esperar para ver culminados el resto de tramos en Burgos. Y eso a pesar de que uno de ellos, el ubicado entre Ibeas de Juarros y la circunvalación de la capital (4,2 kilómetros), debería estar ya operativo desde hace tiempo.

De hecho, las obras se adjudicaron en 2018 a la UTE formada por las empresas Joca y Ocide con una significativa baja presupuestaria, pero apenas se vio movimiento en la zona. Y es que, apenas unos meses después de 'iniciar' los trabajos, la adjudicataria solicitó un modificado del proyecto que el Ministerio negó, lo que paralizó las obras sin que se hubiera movido ni un ápice de tierra.

Esa circunstancia obligó a rescindir el contrato, un trámite que se culminó en 2021, cuatro años después de firmarse, cuando las obras ya deberían haber concluido. A partir de ahí, el Ministerio se ha visto obligado a replantear el proyecto, que deberá modificarse sustancialmente una vez liberalizada la AP-1, donde está previsto que entronque la A-12. La redacción de dicha modificación se adjudicó el año pasado, pero todavía no se ha culminado, por lo que el inicio efectivo de las obras deberá esperar todavía varios años.

También se encuentran en un compás de espera los otros dos grandes tramos de la autovía en suelo burgalés, situados entre Ibeas y Villafranca Montes de Oca (24,3 kilómetros) y entre Villafranca y Villamayor del Río (16,6 kilómetros). Ambos proyectos fueron aprobados de manera definitiva por el Ministerio en 2015 y 2016, pero desde entonces no se ha avanzado en ninguno de ellos. No se ha movido ni siquiera un papel.

Y esa falta de impulso, además, provocará aún más retrasos en la tramitación. Y es que, tal y como reconoció meses atrás el Gobierno en respuesta a las preguntas formuladas en el senador por Javier Lacalle, ambos proyectos deberán ser revisados para actualizar los precios. Así, la licitación, adjudicación y ejecución de las obras deberá esperar a dicha actualización. Y en la práctica, eso supone que, en el mejor de los casos, habrá que esperar varios años para ver máquinas trabajando en la construcción de la autovía.

Sí que parece que avanza a mejor ritmo la tramitación del proyecto de mejora de la AP-1 entre Burgos y Miranda. Un proyecto solicitado de manera reiterada tras la liberalización de la antigua autopista en 2018 con el objetivo de adaptar la vía a la nueva realidad.

En este sentido, el pasado mes de marzo se licitaba la redacción del proyecto de construcción del tercer carril entre Zuñeda y Ameyugo, primer paso de un ambicioso programa de actuaciones presupuestado en 287 millones de euros a realizar durante los próximos años.

Mientras tanto, eso sí, la antigua autopista continúa registrando atascos monumentales en cada operación especial de tráfico y cada vez que e registra un accidente en algún punto sensible, tal y como se pudo comprobar durante la pasada Semana Santa.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

burgosconecta Burgos acumula 130 kilómetros de autovía pendientes de desarrollar