Los burgaleses que se van fuera a trabajar cobran casi un 6% más

Su suelo medio anual (SMA) se situó en 25.344 euros el pasado año, casi un 6% menos que los que cogieron el petate y se marcharon fuera de Burgos en busca de un futuro mejor. Estos 2.701 trabajadores que pusieron rumbo a otras provincias, comunidades o países cobraron un promedio de 26.832 euros al año, retribución que aumentó respecto a 2021 en 4.729 euros.

Así, la diferencia entre lo que perciben los que apuestan por quedarse en tierras burgalesas, según los datos de Hacienda, es cercana a los 1.500 euros. Además, aquellos que deciden marcharse resultan más aventajados, no sólo porque el sueldo es más alto, sino porque también experimentan la segunda subida salarial interanual más alta, el 21,4%, solo por detrás de los charros (22,91%).

De esta manera, la solución de abandonar Burgos parece la óptima para encontrar una mejor retribución. Sin ponderar otros factores más allá de los dinerarios y que pueden hacer este traslado a peor (calidad de vida, distancia familiar, etc.), lo cierto es que la brecha salarial tampoco supone una mejoría tan sustancial en comparación con el resto de provincias de la comunidad.

Burgos es, de hecho, la que ofrece la segunda distancia salarial más baja de todo Castilla y León entre los que se quedan y los que se van, solo por encima de Valladolid, cuyos asalariados reciben un SMA 1.433 euros menor que los que salen a otros territorios en busca de oportunidades.

Esta brecha entre los asalariados que permanecen y los que se van es sustancialmente superior en el resto de la comunidad. Cuatro provincias ubican esta diferencia por encima de los 3.000 euros anuales. La que más distancia expuso en el año anterior fue León, con 3.541 euros de pérdida entre los que permanecieron en la provincia y los que se marcharon fuera a trabajar.

Al acecho de esta negativa estadística se encuentra Segovia, cuya cercanía con Madrid penaliza a los segovianos que se quedan en su tierra con un salario medio anual hasta 3.527 euros inferior. Ávila y Salamanca reflejaron un resto de 3.201 euros y 3.161 euros de SMA favorable a los que se marchan. Zamora roza esta cifra pero se mantiene por debajo de los tres millares (2.904 euros) de penalización salarial para los trabajadores que apostaron por permanecer en su provincia.

Mejor lo tienen aquellos que deciden venir a trabajar a Burgos. Y es que los 1.534 asalariados que decidieron apostar por trasladarse a la provincia para trabajar alcanzaron los 23.567 euros, un SMA incluso superior incluso a los que continuaron asentados en ella. Los datos de la Agencia Tributaria confirman una subida del 18% en estas remuneraciones medias respecto a 2021 (de 19.973 a los 23.567 euros en 2022).

Este incremento vuelve a contrastar con el de los trabajadores asentados en la provincia, que solo anotaron un crecimiento del 8,08% en comparación con el SMA de 2021 (de 23.450 a 25.344 euros de 2022). Aún así, se mantiene como la tercera provincia que más creció en este indicador, por detrás de Segovia (8,16%) y Salamanca (8,34%).