La archidiócesis de Burgos busca recaudar 60.000 euros para restaurar templos de la provincia

La archidiócesis de Burgos pone en marcha este domingo 11 de agosto una nueva colecta para recaudar dinero que sirva para restaurar los templos de la provincia de Burgos. Se trata de la campaña Protemplos y, en esta ocasión lleva por lema: «Nuestro patrimonio, nuestro corazón: dona para mantenerlo vivo».

Desde el año 2017 la campaña Protemplos ha recaudado 208.736 euros que han servido para restaurar o asentar 82 iglesias y ermitas de Burgos. Este año, la archidiócesis de Burgos pretende doblar lo recaudado en las últimas ediciones y aspira a superar los 60.000 euros de recaudación.

La colecta central de esta campaña se llevará a cabo el domingo 11 de agosto. A través de sobres que se distribuirán en las iglesias, los feligreses pueden donar para este fin. Además, las donaciones se pueden realizar en cualquier momento del año a través del sitio web donoamiiglesias.es o escaneando el código QR de los carteles. Los donativos se pueden acoger a ventajas fiscales, tanto las personas físicas como las jurídicas.

Protemplos es una campaña de recolecta de dinero y, además de buscar esa ayuda económica, intenta involucrar a las parroquias y ayuntamientos. El dinero recaudado por la archidiócesis se gestiona en un fondo único, distribuido por la Comisión de Patrimonio Cultural. Las ayudas se priorizan según la urgencia y necesidad económica de cada parroquia. Se otorgan más recursos a las parroquias que más lo necesiten y a aquellas que no pueden acogerse a otras ayudas habituales, como el conocido Convenio de las Goteras entre la Diputación de Burgos y el Arzobispado.

Como sostiene la ecónoma diocesana, Mariola Rilova, los recursos económicos para mantener en pie los 1.700 templos de la archidiócesis «son limitados». Con lo recaudado en la campaña Protemplos, se quiere ayudar a todas aquellas parroquias que no pueden acogerse a otras subvenciones, pudiendo así «arañar» el dinero necesario para reparar tejados y cubiertas, consolidar muros y cimientos que amenazan la integridad de iglesias y ermitas.

Los templos son el «corazón de nuestros pueblos», el lugar donde se crea comunidad y que aúnan «sentimientos y simbolismo», pues en ellos se bautiza, se fundan familias y se despide a los seres queridos. De esta manera, «más que un problema, el patrimonio se convierte en una oportunidad para recuperar la ilusión de los pueblos», como sostiene Juan Miguel Gutiérrez, párroco de 45 localidades al norte de la provincia.

Él es testigo del revulsivo que supone el cuidado y la preservación del patrimonio. El monasterio de Rioseco atrae cada verano a cientos de voluntarios que desean recuperar este enclave, convirtiéndose en «un emblema de lo que podemos conseguir». Un patrimonio que une a las personas de las pequeñas localidades, que atrae turismo, riqueza y oportunidades para los pueblos de la España Vaciada. Como miembro de la comisión diocesana de Patrimonio Cultural, sostiene que Protemplos supone «un pequeño empujón para animar a los pueblos a seguir soñando».

«Es un recurso más al que acudir», como explica José Luis de Miguel, concejal del ayuntamiento de Merindad de Río Ubierna y testigo de la implicación del pueblo de Masa en reparar el retablo y el reloj de su parroquia. «Ha sido un gran proyecto de unión de todo el pueblo y estamos felices porque hemos conseguido dar esplendor a la iglesia».

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