El 5,6 % del agua de Burgos que acaba en la cuenca del Duero no está depurada

A mediados del mes de marzo el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, visitará la provincia de Burgos para firmar el convenio por cuatro anualidades para afrontar entre las dos instituciones las obras para las depuradoras de estas poblaciones de menos de 500 habitantes. Estas actuaciones no requieren grandes inversiones, pero son las pequeñas poblaciones las que más problemas en cuanto a la depuración de aguas presentan. En algunos casos por ausencia de depuración, en otros, por disponer de un sistema obsoleto o con mal funcionamiento.

Así se explica desde la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD). La entidad reconoce que la mayor parte del agua sin depurar que los pueblos burgaleses vierten a la cuenca proceden de pequeñas poblaciones.

La CHD indica que el porcentaje de población (habitantes equivalentes: hab-eq) que dispone de tratamiento considerado como adecuado alcanza actualmente el 94,4 % del total en la provincia de Burgos. El 5,6 % restante o bien no dispone de tratamiento de depuración o este se considera insuficiente y «se origina, en su mayor parte, en pequeñas poblaciones».

El concepto de población equivalente o habitantes equivalentes se utiliza como unidad de medida para establecer la carga contaminante del agua residual bruta.

Según los datos de la Confederación Hidrográfica del Ebro sobre los vertidos urbanos o asimilables y los datos ofrecidos por la Junta de Castilla y León sobre localidades con sistema de depuración, en este caso también son los pequeños vertidos los que, en mayor parte, carecen de sistema de depuración.

En la provincia de Burgos las siete poblaciones que tienen un vertido de volumen superior a los 2.000 hab-eq y que se encuentran en la cuenca del Ebro tienen sistema de depuración. Son Villarcayo, Oña, Miranda de Ebro, Medina de Pomar, Espinosa de los Monteros, Briviesca y Belorado. Del resto de poblaciones o carecen de este sistema o la Junta no los recoge en su portal de Datos Abiertos.

Los vertidos autorizados no son lo mismo ni coinciden con los municipios o industrias que disponen de depuradora o de sistema de depuración. El inventario de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) contabiliza actualmente 461 vertidos de núcleos de población, tanto de entidades locales como entidades locales menores. Estos están autorizados como vertidos al dominio público hidráulico en la parte de la provincia de Burgos englobada en la cuenca del Duero. Estos 461 vertidos pertenecen a 247 términos municipales distintos e incluye vertidos realizados tanto a cauce como directamente a terreno.

En el caso de la Confederación Hidrográfica del Ebro contabilizan 411 vertidos urbanos o asimilables e industriales. Los vertidos urbanos o asimilables autorizados por la CHE son de 337 en la provincia de Burgos.

En ambos casos, la mayoría de estos vertidos son de un volumen de población inferior a 250 hab-eq. Es decir, son de pequeño volumen. En la CHD encontramos municipios más grandes, con vertidos de volumen superior a 2.500 hab-eq, que también cuentan con sistema de depuración, como ocurre en la CHE.

En la CHD estos vertidos autorizados de mayor volumen que también cuentan con depuradora, según los datos del portal Datos Abiertos de la Junta, son Salas de los Infantes, Roa, Quintanar de la Sierra, Lerma, Burgos, Arcos de la Llana y Aranda de Duero.

En octubre de 2020 se firmó un protocolo de actuación entre la Junta de Castilla y León y las diferentes diputaciones de la comunidad. El objetivo era promover el establecimiento de sistemas de depuración de las aguas residuales en los municipios con población de 500 a 2.000 habitantes equivalentes. En el caso de Burgos se preveía actuar en 26 municipios con una inversión estimada de 14 millones de euros.

Las últimas nuevas estaciones depuradoras de aguas residuales que se han puesto en marcha en la provincia de Burgos dentro de este convenio es la Trespaderne y la de Castrojeriz. La de Trespaderne supuso una inversión de 1,45 millones de euros más IVA, financiados al 80 % por la Junta y el 20 % restante por el Ayuntamiento con la colaboración del FEDER (Fondo Europeo de Desarrollo Regional).

A finales de noviembre de 2022 se presentó la renovación de la depuradora de Castrojeriz por 949.336 euros financiados el 80 % por la Junta y el 20 % restante por el Ayuntamiento.

Actualmente, se encuentran en ejecución la depuradora de Cardeñajimeno y la del Parque Tecnológico de Burgos, con una inversión prevista de 2,3 millones.

Según las últimas informaciones de la Junta, de estas 26 depuradoras de Burgos en las que se pretendía actuar, seis obras están en fase de ejecución, tres en fase de licitación, dos obras están pendientes de aprobación de convenio y otras 15 están en fase de redacción de proyecto.

Aunque los vertidos de pequeñas poblaciones sin depurar o con un tratamiento deficiente no suponen un gran porcentaje de los vertidos totales en ambas confederaciones, sí suponen un número elevado de poblaciones que no cuentan con este sistema. La Junta de Castilla y León se ha propuesto un objetivo de cero aguas sin depurar al finalizar esta legislatura.

Por ello, en el último Pleno de la Diputación el PSOE presentó una proposición a este respecto para instar a acelerar estas infraestructuras, hacer un inventario de la situación y realizar una convocatoria. Y el Pleno acordó trabajar para acelerar la depuración de aguas en los pueblos de menos de 500 habitantes. Además, se realizará una convocatoria entre los Ayuntamientos para saber qué pueblos quieren implicarse en el convenio que se firmará con la Junta en esta materia.