El PSOE, a Podemos: «Por supuesto, se cumplirá el compromiso con la OTAN»

Como ya hizo el lunes la vicepresidenta segunda Yolanda Díaz, Irene Montero insistió este martes en que aumentar el presupuesto para las Fuerzas Armadas no figura en el acuerdo de la coalición sobre el techo de gasto, paso previo a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado de 2023. «Somos muy claras, todos los esfuerzos deben ir dedicados a proteger a las familias», señaló la dirigente de Podemos antes de añadir que el difícil momento económico, con una inflación galopante que ha disparado los precios, obliga a concentrar el dinero público en políticas sociales y no en un material de guerra del que «solo se benefician las grandes empresas de armamento».

PSOE y Unidas Podemos comenzaron ya antes de principios de agosto a negociar los Presupuestos, los últimos de esta legislatura y, por tanto, de una importancia vital de cara a las inminentes citas electorales: municipales, autonómicas y generales. No solo eso, las cuentas contemplarán la inversión de buena parte de los fondos de recuperación europeos, nada menos que cerca de 140.000 millones que el Ejecutivo debe gestionar a lo largo del próximo año y cuya utilización supondrá un espaldarazo de cara a la valoración de la gestión de la coalición, tanto para socialistas como para Unidas Podemos. Cada parte del Gobierno quiere dejar su impronta en los próximos Presupuestos.

El PSOE busca reforzar la imagen de liderazgo de Sánchez, tanto a nivel nacional como internacional, mientras que Unidas Podemos trata de decantar el mayor dinero posible a las políticas sociales, de las que presume que a lo largo de esta legislatura se han expandido gracias a la presión se ejerce en el Consejo de ministros sobre los socialistas. Este último es un argumento que disgusta, y mucho, en Ferraz. «Que repitan una y otra vez que el Gobierno solo se mueve en materia social por que Unidas Podemos empuja es algo que resulta especialmente molesto. Todos los ministros socialistas pelean también por obtener los máximos recursos para sus departamentos», se quejan fuentes del PSOE, que reivindican que en el barco del compromiso con las clases bajas y medias su partido es el primero a bordo.

La repuesta a la ministra de Igualdad llegó sucesivamente por parte de Pilar Alegría, Nadia Calviño e Isabel Rodríguez. La titular de Educación y portavoz del PSOE zanjó que, «por supuesto», se cumplirá el compromiso del presidente del Gobierno con la OTAN, lo que supondrá un incremento del gasto en los próximos ejercicios hasta alcanzar el 2% del Producto Interior Bruto (PIB) entre 2028 y 2030. Actualmente España apenas destina un 1% del PIB a gastos militares, pese a que ya en 2017, con Mariano Rajoy en la Moncloa, se comprometió este mismo 2% para 2024.

Alegría defendió que el techo de gasto pactado con Podemos, en ningún caso, consigna las partidas para cada Ministerio. Calviño incidió en que «Pedro Sánchez siempre cumple sus compromisos». «España es un país fiable», remató la portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, tras el Consejo de Ministros. A su izquierda se sentaba Irene Montero, quien guardó silencio.