El PP mantuvo este jueves viva la posibilidad de proceder contra Pedro Sánchez en los tribunales, aunque esta vez las acciones quedaron restringidas a que el jefe del Ejecutivo supere los límites de la Carta Magna en sus conversaciones con el independentismo. «Actuaremos si cede ... lo que la Constitución y el ordenamiento jurídico le impiden negociar en esa mesa de partidos o en cualquier reunión en la que trate algún tipo de prebenda para seguir en el poder o aprobar los Presupuestos», volvió a advertir Pablo Casado apenas concluido el encuentro entre el presidente y Quim Torra.
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Como en ocasiones anteriores, no concretó las medidas legales que el PP podría tener en mente. Hasta ahora, la dirección nacional del partido, preguntada por la reunión con Torra, había exigido al jefe del Ejecutivo el cese del líder de la Generalitat sin descartar la posibilidad de acusar a Sánchez incluso por prevaricación. Pero hoy Casado no precisó si esa es la opción que barajan los populares.
Lo que sí deslizó el líder del PP es que, a su juicio, pueden estar cruzándose algunas líneas rojas incluso antes de que comiencen las conversaciones formales entre el Gobierno y la Generalitat. «En esa mesa de negociación -se refirió a la bilateral pactada con Esquerra y que Sánchez y Torra se han comprometido a activar este mes- se vislumbra sin pudor que puede haber ya cesiones que escamoteen los derechos del conjunto del pueblo español». En concretó, señaló el riesgo de que se hayan sentado «antecedentes» en el «tratamiento de la autodeterminación, la amnistía y la bilateralidad» entre las dos administraciones.
En ese marco contextualizó Casado la cita de Barcelona. En los últimos días ya había puesto de manifiesto que su oposición era total. Con la querella del miércoles contra Torra por supuesta usurpación de funciones, los populares pretendían, de hecho, dejar claro que el presidente de la Generalitat no podía acudir al encuentro en el ejercicio de su cargo cuando ha sido despojado del acta parlamentaria que permitió su investidura. Y con ese argumento, Casado acusó a Sánchez de haber «rendido pleitesía a una persona inhabilitada».
El presidente del PP se pronunció en estos términos en la reunión del grupo parlamentario en el Congreso e incluyó la cita con Torra «en la escapada del PSOE» hacia las «tesis del separatismo». No es la primera vez, en todo caso, que los populares sitúan fuera del «constitucionalismo» a los socialistas. De hecho, consideran que las fuerzas independentistas son la «bombona de oxígeno» del Ejecutivo. «Sánchez -llegó a censurar Casado- está dando pasos irreversibles en la deserción del PSOE de un bloque constitucional».
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