De puntillas y testimonial: así fue la Lotería de Navidad en Burgos

Empezó el sorteo deparando quintos premios y en ninguno de ellos Burgos fue el protagonista. No pasaba nada, quedaba lo más importante por salir y eso tranquilizaba a los ciudadanos que se conectaban a través de las plataformas digitales, radios y televisores para ver cómo salían bolitas de los bombos y escuchaban a dos niños entonar números y cantidades.

No había forma. El tercer premio, uno de los primeros importantes en salir, no se quería adentrar en la provincia. Al igual que los cuartos, el segundo o el Gordo. Ni la venta presencial, ni la elección a través de una máquina quería poner a Burgos en el mapa de la Lotería de Navidad.

Pero cuando el bombo con las bolitas de las cantidades empezaba a rebañar los restos, salió ese 43831 emparejado con el sonido de los 60.000 euros (a la serie) para que la administración El Pulpo de la Suerte repartiera 6.000 euros con la venta de un único décimo.

Más fortuna 'regaló' Carlos Roa en su administración de Miranda de Ebro. Ese mismo número dejó 60.000 euros al vender una serie entre los vecinos de la localidad burgalesa.

Y hasta aquí los premios más señalados del sorteo de Navidad. Después, la fortuna ha querido que esas cifras se edulcorasen con dos aproximaciones. Estas han dejado 24.100 euros entre la capital burgalesa y la localidad de Aranda de Duero. De esta forma, se ha vendido una serie al número 06094, el anterior al segundo premio, en la administración Lotería Mayte, situada en la localidad arandina. Y en Burgos, una serie al número 52471, anterior al tercer premio, en el Gato Negro.

El número 06094, anterior al segundo premio, está premiado con 1.350 euros por décimo, por lo que en Aranda se han repartido 13.500 euros. Por su parte, el número 52471, anterior al tercer premio, reparte 1.060 euros por cada décimo, que suman 10.600 euros.