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Era la foto que el mundo entero estaba esperando. La sorpresa saltaba en la mañana de este domingo cuando para conmemorar el día de la madre, desde el palacio de Kensington se decidía publicar una instantánea de Kate Middleton con sus tres hijos (George, Charlotte y Louis). Una fotografía cuya pretensión no era otra que la de tratar de acallar las teorías conspirativas que desde hace días circulan en torno a la misteriosa operación de abdomen de la princesa y los verdaderos motivos de su desaparición. Después de más de dos meses de ausencia, era de esperar que la primera imagen pública de la Princesa de Gales fuese analizada con lupa y desde todos los ángulos y perspectivas posibles. Sin embargo, parece que la Casa Real británica no tuvo en cuenta este factor y un grave error de comunicación ha conseguido todo el efecto contrario.
Tan solo unas horas después de la publicación de la instantánea, las redes sociales ardían. Los millones de personas que observaron con detenimiento esa imágen, se dieron cuenta rápidamente de que había indicios claros de unos retoques mal hechos y detalles que no cuadraban.
La evidencia más clara de los retoques es sin duda la manga izquierda de la chaqueta de la princesa Charlotte. En la muñeca se observa claramente cómo se superpone el estampado de cuadros de la falda al punto de color rosa de la chaqueta, quedando un trozo del cárdigan perdido. En el otro lado, también se observa como la falda, al contrario que en el lado derecho, queda por encima de la chaqueta y no casa.
Por otro lado, en la parte superior de la chaqueta de Kate algunos han observado como claramente se traza una línea imaginaria como si la parte del cuello y la cara de la mujer del príncipe Guillermo estuvieran superpuestas. La cremallera no coincide y los mechones de pelo tampoco.
La edición de la imagen ha llegado hasta tal punto que algunos usuarios de X (antes Twitter) han apuntado a que la cara de Kate podría ser exactamente la misma que la de la portada que ella misma protagonizó en la revista Vogue.
En cuanto al príncipe Louis hay dos cosas que destacar, por un lado, el bordado del jersey verde, que se mantiene regular durante toda la prenda, en su manga derecha cambia, una línea blanca no coincide y la otra se duplica. Por otro lado, muchos usuarios de las redes han apuntado a que el pequeño de la familia tiene los dedos cruzados, un gesto que los niños utilizan cuando saben que están mintiendo.
La mano de Kate Middleton que sujeta al príncipe Louis se ve claramente difuminada, y esto podría coincidir con que es la primera vez que vemos a la princesa sin anillo de compromiso.
AUX STEP FOR JS
Reuters, Associated Press (AP), France Presse (AFP) y Getty Images decidieron retirar la imagen de sus archivos ante la clara evidencia de que estaba retocada. Por ello, desde el palacio de Kensington se han visto obligados a pedir disculpas en nombre de Kate. «Como muchos fotógrafos aficionados, a veces experimento con la edición. Quiero expresar mi petición de disculpas por la confusión creada por la fotografía de familia que publicamos ayer. Espero que todos los que celebraron tuvieran un Día de la Madre muy feliz», concluye el comunicado firmado con una simple «C». Casa Real española tuvo que hacer frente a un suceso similar cuando la reina Sofía editó ella misma con photoshop la postal navideña del año 2005 en la que salía rodeada de todos sus nietos. Al ser descubiertos, admitieron que no podían coincidir con todos ellos.
Desde el equipo de comunicación de los príncipes se ha señalado que la foto en cuestión fue tomada por Guillermo de Inglaterra a principios de esta misma semana en un intento de apaciguar los ánimos y los comentarios. Normalmente, es la propia Kate quien hace las fotografías familiares, debido a su pasión por ese mundo, y después se difunden. Esto, unido a la imagen publicada por la página web estadounidense TMZ en la que se ve a la princesa en un coche con su madre y no con Guillermo después de que no había acudido a la misa funeral por Constantino de Grecia por quedarse a su lado, no hace más que aumentar las teorías de la conspiración sobre el verdadero estado de la que es uno de los miembros más queridos de toda la familia real británica, la futura reina.
Kensington Palace
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Sara I. Belled, Clara Privé y Lourdes Pérez
Clara Alba, Cristina Cándido y Leticia Aróstegui
Javier Martínez y Leticia Aróstegui
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