Burgos registra 177 ERTEs por la crisis del coronavirus, que afectarían a 1.500 trabajadores

Cierto es que los primeros en presentar regulaciones de empleo han sido los negocios vinculados a ocupaciones sobre las que se ha decretado el cierre de actividad, como la hostelería. Sin embargo, se están extendiendo a otros sectores, como la industria, pues faltan suministros o no hay demanda para lo que se produce. Y es que pocos serán los sectores que se libren de las consecuencias de la crisis sanitaria, más allá de la alimentación, que incluso ha incrementado la actividad.

Grandes, medianos y pequeños. Nadie se libra de la paralización económica, por ese motivo el Gobierno ha impulsado modificaciones normativas que facilitan la presentación de ERTEs sustentandos en el coronavirus, como causa de fuerza mayor. Y la Junta recordaba esta misma mañana que no se ha a aceptar ningún ERE al uso, de suspensión de actividad, bajo la excusa del coronavirus. Que todos deberán ser ERTE, para garantizar que se recupera el empleo que ahora se paralizada.

Eso sí, UGT alerta de que algunos de los ERTE que se hayan podido presentar en los últimos días podrían contener irregularidades que les abocasen a ser considerados nulos. Ramiro Marijuán, responsable de FICA UGT, recuerda que el Real Decreto del Gobierno central incluye una modificación con respecto a la reforma laboral, de modo que se debe llamar a participar a los sindicatos a la hora de presentar un ERTE.

Esto es así tanto si la empresa cuenta con comité o representación sindical como si no. Y la documentación que ha estado pasando la Junta no lo incluye, así que algunos ERTE se habrán presentado sin haber contactado con los sindicatos. Se les ha avisado y parece que van a enmedar el error para no generar mayores problemas, añadidos a los derivados de la crisis sanitaria.

Marijuán defiende la presencia de los sindicatos en las negociaciones de los expedientes de regulación pues siempre se intentará cerrar un acuerdo para no dejar desprotegido al trabajador. Es más, el responsable sindical recuerda que decisiones como dar vacaciones a la plantilla o mandarlos para casa «y ya recuperarán los días en otro momento» no se puede hacer, pues contraviene los derechos laborales.

La solución, ante una ralentización o paralización de la actividad empresarial, es el ERTE, que ampara una regulación de empleo de caracter temporal y por causa de fuerza mayor. Se suele aplicar cuando se produce un incendio, una inundación o una crisis sanitaria (esta última no es habitual), recuerda Marijuán, que reconoce que el ERTE llegará también a UGT pues hay servicios parados y es la mejor solución.

Eso sí, no se saben los efectos que tendrán estos ERTEs en la economía pues algunas empresas sí que tienen intención de reabrir en un breve espacio de tiempo. Es el caso de aquellas que trabajan con el mercado chino, que parece que empezará a recuperarse con mayor agilidad y obligará a retomar la actividad.