El Recoletas Burgos Caja Rural se estrena con victoria en San Amaro

La primera parte fue gualdinegra, con el equipo de Basso arrollando en los primeros instantes a un cuadro madrileño al que le costó entrar en el partido y lo pagó con tantos. En la reanudación, los burgaleses salieron fuertes, pero dos ensayos consecutivos de los de Javier Garrido lograron inquietar a los castellanos, que reaccionaron de manera contundente para cerrar el partido con una ventaja de más de veinte puntos.

Arrancaba la nueva temporada en casa del supercampeón de España, en los campos de San Amaro, con la intensidad característica de los del nuevo jefe gualdinegro, José Guillermo Basso. Un golpe de castigo a la 22 del recién ascendido Alcobendas Rugby por parte del capitán Carrió permitió al Recoletas avanzar y quedarse a tiro de ensayo.

Una magnífica touch y un no menos bueno maul local permitieron descontar los cinco primeros tantos a los burgaleses, que se convirtieron en siete tras la patada de Tomás Carrió. Así, en apenas tres minutos, el cuadro burgalés inauguraba el conteo para encarrilar el partido.

Salió arrollando el Recoletas Burgos-Caja Rural, que antes de llegar a los diez minutos ya volvía a anotar imponiendo su fortaleza frente a la defensa del conjunto madrileño, ocasión que no desaprovechó Carrió para poner el 14-0 con una patada centrada a los palos visitantes.

Los de Javier Garrido intentaron tirar de ilusión y juventud para sacarse de encima el empuje local arropado por la afición gualdinegra y obligó a varias patadas desde el fondo del campo local. Pero el equipo burgalés imponía su condición y ganaba terreno a cada intento de ataque de Alcobendas, que tiraba de puntapié para evitar una recuperación gualdinegra cerca de la zona de ensayo.

Esa pujanza madrileña dio sus frutos en torno al 24 de partido, cuando los madrileños lograron armar un maul a y empujar hacia la zona de ensayo burgalesa, pero los de Basso se mostraron firmes y desbarataron el peligro a través de la zurda de Carrió.

Antes de la media hora de encuentro, una gran patada de Rascón por la izquierda encontró el hueco para una recepción de Facundo López y permitió a las líneas gualdinegras colocarse al borde del tercer ensayo del partido antes de la pausa de hidratación indicada por el árbitro debido a las altas temperaturas que el veranillo de San Miguel dejó en Burgos este domingo.

Dos melés tras sendos golpes de castigo le costó a Recoletas Burgos Caja Rural percutir el muro madrileño antes de encontrar la entrada del internacional español Mateu por el centro para subir, transformación mediante del '10' gualdinegro, el 21-0 para los burgaleses.

En las postrimerías de la primera parte, el Silicius Alcobendas, con un arreón final, logró avanzar y colocarse en campo rival. Tras una infracción y una tarjeta amarilla, la jugada empeoró aún más tras la touch en la derecha, cuando el empuje madrileño y una falta del cuadro local sumaban los siete puntos directos al marcador visitante tras indicar el colegiado un ensayo de castigo a favor de los madrileños (26-7).

Pero poco le duró la alegría a los de Javier Garrido. En el añadido de la primera entrega del choque, el Recoletas Burgos Caja Rural subió la reacción al marcador del partido con una poderosa melé que arrolló la oposición para sumar cinco tantos más al marcador burgalés. Carrió, desde un perfil escorado en la derecha del ataque local, no pudo embocar el oval para aumentar una diferencia que reflejaba la superioridad gualdinegra en los primeros cuarenta minutos.

La segunda parte comenzó como terminó la primera. El cuadro burgalés volvió a salir más enchufado que el madrileño y ya desde la patada inicial, se colocó en campo madrileño. En dos minutos, tras una potente melé, Valentín Bustos tiraba de fortaleza para convertir un nuevo ensayo, el quinto burgalés, y poner el 31-7 en el conteo para que Carrió sumase, ahora sí, los dos puntos de la transformación y ampliase aún más la ventaja.

Intentaba la réplica Alcobendas con un ataque a través de una touch en el perfil derecho del campo gualdinegro, pero la defensa castellana se mostró de nuevo sólida y repelió los intentos de percutir de los madrileños para sacar el juego a la medular del campo.Tiraron entonces de coraje y velocidad los de Javier Garrido para intentar mover a un bien plantado Recoletas Burgos-Caja Rural que aprovechó la urgencia visitante para robar la posesión en una gran interceptación de Sacovechi.

En el minuto 51, Aaron Rus identificó el espacio entre las líneas burgalesas y se filtró desde la derecha con una extraordinaria carrera que convirtió en el segundo ensayo de Alcobendas en el partido. En la patada, Zabalegui, ex del cuadro gualdinegro, puso dos puntos más en el conteo madrileño para llevar hasta los 14 puntos a su equipo.

En esas, el Alcobendas aprovechaba sus mejores minutos en el partido para confirmar su reacción con un nuevo ensayo de Roy Jon Lura convertido de nuevo por Zabalegui (33-21) y seguir recortando distancias en el marcador en una acción en que la defensa burgalesa estuvo demasiado permeable. Los dos zarpazos madrileños abrieron un partido que parecía controlado por un conjunto gualdinegro que buscaba encontrarse de nuevo en el partido. Y lo hizo con una melé.

El empuje burgalés -que cambió su primera línea al completo- propició un golpe de castigo que uno de los flamantes fichajes de esta temporada, Marcel Sirvent, transformó unos metros más adelante de la divisoria para volver a golpear en el marcador y descontar tres puntos a la remontada visitante.

Pero el Alcobendas, campeón invicto la pasada campaña en División de Honor B, no iba a darse por vencido y en el minuto 66, el cuadro alcobendense encontró en una inteligente y sutil patada de Zabalegui la vía perfecta para la carrera por izquierda de Xabier Martín, que puso el partido en el alero de nuevo (36-26).

Cinco minutos tardó en responder el Recoletas Burgos-Caja Rural, muy superior en todas las melés, con una buena jugada trenzada por izquierda en la que Facundo López asistió la carrera de Rascón pegado a la línea de banda para anotar un nuevo ensayo y poner tierra de por medio, pese al fallo de Sirvent en la transformación.

Pero el joven apertura, ex de la Santboiana, tuvo la revalida cuatro minutos después tras el ensayo de Noah Canepa, que se coló con una poderosa carrera en el carril derecho para sumar cinco tantos más al conteo burgalés y cerrar cualquier esperanza de remontada a los madrileños.

El pitido final de Roger Parera confirmó el estreno con victoria del supercampeón de España ante un valiente recién ascendido Alcobendas Rugby que pusó la duda con dos ensayos seguidos en la segunda mitad pero finalmente no pudo con la superioridad burgalesa.