Secciones
Servicios
Destacamos
«Cada día tenemos en la mente ese objetivo. El sueño es quedar campeón en los Juegos». Nikoloz Sherazadishvili (Tiflis, Georgia, 1996) lo tiene claro, no rehúye la enorme presión de ser una de las mejores opciones de medalla de España en Tokio y ... mantiene intacta su máxima ambición a escasos meses de la gran cita olímpica en la capital de Japón, la cuna del judo.
El oro en el Grand Slam de París del pasado domingo, una de las citas de referencia del calendario en el judo mundial, no hace sino acreditar y justificar su anhelo de gloria olímpica. El judoca de origen georgiano está en la senda del éxito después de un 2019 complicado, en el que no pudo revalidar su título mundial en la categoría de hasta 90 kilos, conquistado en Bakú (Azerbaiyán) en 2018. La sorprendente derrota ante el francés Axel Clerget apeó a Niko de la lucha por las medallas en un Campeonato del Mundo al que llegaba como líder del ranking mundial y que servía de ensayo general para los Juegos, pues además se disputaba en el Nippon Budokan de Tokio.
El primer campeón del mundo de la historia del judo masculino español vivió sus primeros años de infancia lejos de las fronteras de España. Nacido en 1996 en Tiflis, la capital de Georgia, emigró junto a su familia a Madrid en 2010, a los trece años. Practicante desde muy niño de judo y waterpolo, una figura clave para entender su éxito deportivo le hizo decantarse por el arte marcial de origen japonés. Se trata de Joaquín Ruiz, 'Quino', subcampeón mundial en 1991, campeón europeo en 1988 y olímpico en Los Ángeles 84, Seúl 88 y Barcelona 92, cuya dirección pulió las muchas posibilidades de Niko en la escuela de judo que dirige en la localidad madrileña de Brunete.
Allí entrena cada día un campeón mundial, allí se cuece un sueño olímpico, en un gimnasio de poco más de cien metros cuadrados, en unas condiciones a años luz de las que disfrutan judocas de otros países pero que no impiden al pupilo de Quino codearse con los mejores del mundo. «Cuando llegué a Madrid un amigo de mi padre preguntó por un club, por cuál era el mejor de Madrid. Nos dijeron otro, en el que entrenaba dos horas a la semana y era muy poco para mí. Buscaba un gimnasio donde se entrenara todos los días», explica Niko sobre su llegada a la escuela de Quino, su padre deportivo. El biológico lo perdió en 2017 por un infarto que le costó la vida a los 47 años. Zakaria Sherazadishvili, medallista en los campeonatos soviéticos de judo, fue quien le transmitió el amor por el deporte. Él fue la inspiración del joven Niko y en su memoria pisa con fuerza el tatami antes de cada combate.
En septiembre de 2018, un año después de la muerte del que era su modelo a seguir y apenas unas semanas después de perder también a un primo de su edad, Niko tocó el cielo con el oro mundial de Bakú, el que le situó en el centro de todos los focos después de derrotar al cubano Iván Silva Morales, campeón panamericano. Desde entonces, también ha tenido que experimentar la dificultad de responder a unas expectativas que están en lo más alto. El traspié del Mundial de Tokio le ha enseñado a lidiar con la presión de ser favorito y sólo piensa en regresar a Japón, donde nació el judo, para conquistar el oro olímpico. Niko sabe bien lo que es levantarse de un golpe duro en la vida. Cómo no iba a hacerlo sobre el tatami.
Dos modelos a seguir Zakaria, el padre de Niko, fue quien le transmitió el amor por el judo, un deporte en el que ha triunfado de la mano de su entrenador, Joaquín Ruiz, 'Quino'.
Oro mundial En septiembre de 2018, apenas un año después de perder a su progenitor por un infarto, conquistó en Bakú la corona en el Campeonato del Mundo.
Defensa fallida No pudo retener su título en Tokio 2019, pues el francés Axel Clerget le dejó sin medalla.
Noticia Relacionada
miguel olmeda
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.