Oyarzabal, sobre Francia: «No hay que tener miedo a nada»

Así lo manifestó Mikel Oyarzabal a poco más de 48 horas del duelo ante Francia, la vigente campeona del mundo y el más difícil todavía a tenor de la exhibición de los galos en una segunda parte frente a Bélgica en la que remontaron un 2-0 adverso y presumieron de verticalidad y pegada. Pese a la amenaza de los Benzema, Mbappé o Griezmann el guipuzcoano ejerció de voz del vestuario para transmitir firmeza y determinación ante el desafío: «Está claro que son grandísimos jugadores y sabemos el nivel que tienen, pero no hay que tenerle miedo a nada. Hay que tener respeto a una gran selección pero nosotros tenemos también una gran equipo y si estamos acertados vamos a tener posibilidades de ganar».

En la línea de lo manifestado por Luis Enrique tras la victoria contra Italia, Oyarzabal se centra más en lo propio que en lo ajeno y huye de obsesiones con un adversario que asusta: «No teníamos preferencia alguna, tanto una como otra son grandes selecciones y nos iban a poner en aprietos cualquiera de las dos. Ha tocado Francia pero nosotros nos centramos en lo nuestro. Si estamos centrados como ante Italia sabemos que tendremos posibilidades de ganar». «Cualquiera de los tres sería un buen fichaje para cualquier equipo, pero si me tengo que quedar con alguien me quedo con lo mío, con la selección», incidió cuando se le preguntó por su preferencia personal entre los tres tenores del tridente ofensivo francés.

En este sentido, Griezmann mantiene una conexión con Oyarzabal, un joven aficionado de la Real Sociedad cuando el galo ya deslumbraba de 'txuri urdin'. «Cuando Antoine estuvo en la Real yo todavía era un niño y no sabía mucho de fútbol, pero marcó una etapa en su paso por el club. Ya sabemos la calidad que tiene y mañana habrá que estar muy atentos», rememoró el hoy capitán realista.

Ya en faena, el zurdo reconoció que el plan ideal de partido para España pasa por un guion basado en las posesiones largas y no en un ida y vuelta que favorezca la verticalidad y la pólvora del rival. «Si dibujamos un plan de partido nadie lo haría con muchas pérdidas de balón o transiciones. Tenemos nuestras ideas y nuestras armas, hemos trabajado hoy y trabajaremos mañana en un plan de partido que nos beneficie», explicó sobre el planteamiento táctico más conveniente.

En lo personal, con una veintena de internacionalidades a sus espaldas, vive un momento dulce Oyarzabal, poseedor de una pierna zurda de seda, autor de las dos asistencias a Ferran Torres contra Italia y todo un comodín para Luis Enrique por su polivalencia en el frente de ataque. Precisamente en referencia a la movilidad y el constante cambio de posiciones que le pide el asturiano reconoce que no es fácil, pero se muestra dispuesto a aportar aquello que le pida el seleccionador, consciente de la exigencia y de las jerarquías propias del combinado nacional: «Te guste o no muchas veces es lo que te toca y lo que tienes que saber hacer. Aquí en la selección, aunque hay mucha gente joven, hay también veteranos y otros estamos entrando en la dinámica. Llegará el momento en el que toque dar ese paso adelante pero como lo hice en la Real, con naturalidad».

En cualquier caso, si para alguien el duelo contra Francia supondrá algo especial ese es sin duda Aymeric Laporte, francés de nacimiento y nacionalizado casi de urgencia antes de la Eurocopa. En este sentido, su compañero Oyarzabal le da naturalidad a la situación y ve al central en plenas condiciones para afrontar el partido: «Laporte está como uno más. Con las mismas ganas de hacerlo bien y ganar que el resto. Todos tenemos una idea y es la de hacer algo parecido a lo del miércoles contra Italia y llevarnos un título que nos hace mucha ilusión. Si está aquí con nosotros, ha venido siempre que ha habido parón de selecciones y juega siempre es porque está haciendo las cosas bien. Tanto él como el resto de centrales son de altísimo nivel y juegue quien juegue el equipo sabe lo que tiene que hacer».