El Mirandés escoge el fortín de Ipurua para puntuar por primera vez a domicilio

Madrugó el ataque dispuesto por Gaizka Garitano a la hora de mostrar sus cartas con un testarazo manso y centrado de Leschuk que atrapó Alfonso Herrero, quien parece haber ganado, de momento, el debate generado en la portería del Mirandés. Ya rebasado el minuto 15 llegó el primer susto serio para la formación mirandesa, con un gol de Corpas anulado por un fuera de juego milimétrico al momento de acudir al pase lanzado desde la frontal. Una vez más la embestida de la formación armera llegó por el perfil izquierdo, donde García de Albéniz se convirtió en un puñal contra el que fue su equipo el curso pasado.

La réplica del equipo de Joseba Etxeberria no se hizo esperar. De ello se encargó Raúl con un cabezazo a la escuadra que rechazó Yoel en un vuelo portentoso. Solo la manopla del meta vigués impidió el séptimo tanto del delantero del cuadro jabato, que se encargó de desquiciar a la zaga local con sus movimientos en el área. A partir de ese momento llegaron los mejores minutos de juego por parte de los hombres de Etxeberria. Rápidas combinaciones bien trenzadas con las que consiguieron encerrar a los pupilos de Gaizka Garitano en su campo.

Una tónica que se mantuvo en el comienzo de la segunda mitad, además de añadir filo con balones profundos sobre la línea de fuera de juego trazada por la defensa del Eibar. No por ello dejó de generar peligro el cuadro azulgrana en dos ocasiones muy claras. Primero Sergio Álvarez no pudo acomodar dentro del área la prolongación de Leschuk al envío largo de Yoel. En la continuación fue Stoichkov quien zanjó la opción de peligro con un remate durísimo que se estrelló en la espalda de un defensor.

Esa es, sin duda, una de las señas de identidad del cuadro de Gaizka Garitano: generar mucho con muy poco. Otra muestra de ello la volvió a dar Stoichkov con una arrancada desde la frontal que zanjó con un disparo elevado. A esas alturas del pulso, el Eibar había recuperado la iniciativa sobre el césped frente a un Mirandés con exceso de fatiga en mitad del correcalles.

Un choque de ida y vuelta en el que Manu García probó fortuna sin puntería desde la frontal del área y Tejero soltó un zapatazo que salvó cerca del larguero Alfonso Herrero. Regresó al área rival el ataque mirandés por partida doble. Lo intentó Nico Serrano, tras un saque de banda servido al área, que remató sobre la espalda de Matheus. Sin pausa, fue Salinas quien se escapó de su par y provocó la estirada del meta Yoel con un derechazo no lo suficientemente cruzado. Aún hubo tiempo para una última intervención de Alfonso Herrero a cabezazo de Bautista antes de que el colegiado pitase el final y se repartiera un punto a cada equipo como recompensa por el esfuerzo realizado.