Sergio Ramos vuelve a romperse

«Tras las pruebas realizadas hoy a nuestro capitán Sergio Ramos por los Servicios Médicos del Real Madrid se le ha diagnosticado una lesión muscular en el gemelo interno de la pierna izquierda. Pendiente de evolución», reza el parte médico difundido por el club de Chamartín este jueves, poco después de que el central se ejercitase en el interior de las instalaciones y disparase las alarmas.

Minutos más tarde, el defensor sevillano revelaba en su cuenta de Instagram el modo en el que se produjo esa lesión al término del encuentro que disputó el miércoles con la selección española ante Kosovo en el estadio de La Cartuja. «Ayer, tras el partido, me quedé entrenando sobre el terreno de juego y noté un pinchazo en el gemelo izquierdo. Hoy me han realizado las pruebas y se ha confirmado que tengo una lesión muscular», resalta el camero, que saltó al césped en el minuto 85 del choque ante el combinado balcánico y sumó su partido número 180 como internacional, a cuatro del récord mundial que ostenta el egipcio Ahmed Hassan.

Cumplimentada esa participación testimonial en el envite correspondiente a la tercera jornada de la fase de clasificación para el Mundial de Catar, Sergio Ramos se quedó estirando junto a otros compañeros de la selección y fue entonces cuando sintió un dolor que dio la voz de alerta. «Si hay algo que me duele es no poder ayudar al equipo en estos partidos de máxima exigencia en los que nos jugamos la temporada y también no poder devolveros sobre el terreno de juego el cariño y la energía que me transmitís. No puedo hacer otra cosa que hablar con franqueza, trabajar duro y animar al equipo con el alma», agrega el zaguero en referencia a los vitales enfrentamientos que se le avecinan al Real Madrid en este mes de abril que su capitán pasará de nuevo en el dique seco.

Porque los blancos retomarán el pulso por la Liga el sábado frente al Eibar antes de afrontar una semana decisiva en la que primero recibirán el martes al Liverpool en el Alfredo Di Stéfano, encuentro correspondiente a la ida de cuartos de final de la Liga de Campeones, y cuatro días después se medirán al Barça en el mismo escenario, cita correspondiente a la trigésimo primera jornada de Liga. Posteriormente viajarán a Liverpool para medirse al conjunto de Jürgen Klopp en Anfield el 14 de abril. Getafe, Cádiz y Betis serán sus siguientes contrincantes en la Liga y para finales de mes están fijadas las semifinales de la Champions, en las que sueñan con estar los blancos.

Una senda que tendrá que ver por televisión Sergio Ramos, que podría estar alrededor de un mes de baja, prolongando así el calvario que se abrió a comienzos de febrero con su operación de rodilla. «La verdad es que llevo unas semanas bastante duras. Una intervención siempre es un parón deportivo y emocional. Por suerte, desde hace ya unos cuantos días me he ido encontrando mejor, pero en el fútbol como en la vida, la mala suerte también juega un papel», explica el central al relatar el nuevo contratiempo sufrido en una campaña que podría ser la última vestido de blanco, en caso de que no alcance un acuerdo para renovar el contrato que expira el próximo 30 de junio.

Sergio Ramos, que regresó a los terrenos de juego el 13 de marzo frente al Elche tras perderse diez partidos con el Real Madrid por su intervención en el menisco de la rodilla izquierda, disputó también 64 minutos en el duelo de vuelta de octavos de la Champions contra el Atalanta, pero no viajó a Vigo para medirse al Celta por precaución, en el último duelo de los blancos antes del parón internacional. Convocado por Luis Enrique, completó 45 minutos frente a Grecia, vio desde la grada el partido ante Georgia y volvió a ser suplente contra Kosovo, choque en el que solo participó en los cinco últimos minutos.

Su baja complica los planes de Zidane, que seguirá tirando de Nacho Fernández como compañero de Raphael Varane en el eje de la zaga mientras el capitán del Real Madrid se recupera de su lesión en el gemelo.