El Real Madrid mantiene la pelea al rojo vivo

Acostumbrado a remendar una y otra vez la retaguardia a medida que sus efectivos entraban y salían de la enfermería, Zidane tendrá que hacer esta vez verdaderos malabares para resguardar a Courtois del fuego enemigo. Ausentes Carvajal, Lucas Vázquez, Sergio Ramos, Varane, Mendy y Marcelo, este último sin parte médico de por medio pese a entrenar el miércoles con el grupo, los blancos viajaron a Andalucía con apenas cuatro zagueros en la lista de veinte expedicionarios: Militao, Nacho, Odriozola y Miguel Gutiérrez. Ninguno de ellos figuraba en el plan A del técnico cuando arrancó la campaña y el último, campeón de la Youth League y pilar del Castilla de Raúl González, ni siquiera pertenece a la primera plantilla, pero a ellos tendrá que encomendarse para seguir aspirando a revalidar el trofeo que conquistó el pasado curso aferrándose precisamente a su vena más italiana.

El azar ha deparado que la ciudad de La Alhambra vea otro Granada-Real Madrid en la trigésimo sexta jornada de Liga diez meses después de aquel encuentro resuelto con un triunfo de los blancos por 1-2 que les permitió campeonar en la siguiente fecha venciendo al Villarreal en el Alfredo Di Stéfano. Mendy y Benzema facturaron los tantos visitantes en aquella cita a la que la escuadra de la capital española acudió con su muro de campanillas. Carvajal, Varane, Sergio Ramos y el señalado Mendy custodiaban el área de Courtois. El cancerbero belga enlazaba cinco partidos sin encajar y, aunque la diana de Machís tras un error de Casemiro en la segunda parte detuvo en 511 su cuenta de minutos imbatido, los blancos solventaron el duelo y cantaron el alirón tres días después en Valdebebas.

Este jueves, esos cuatro cromos que seguían conformando la defensa de gala a comienzos de la presente campaña seguirán el pleito por televisión, convalecientes de unos percances que, a excepción del central francés, les impedirán vestirse de corto en lo que resta de temporada. Y a Zidane no le quedará más remedio que echarse en brazos de sus suplentes. O de los suplentes de los suplentes, en algún que otro caso. Porque Odriozola llega con una sobrecarga muscular y su puesto en el lateral derecho lo ocupará Marvin, otro 'mirlo' ya con experiencia en Primera, como solución de emergencia. Despejado está el panorama en el otro costado para Miguel Gutiérrez, una de las grandes promesas de La Fábrica.

Más opciones hay del centro del campo en adelante, donde Zidane tiene todos los recursos posibles para seguir extendiendo la racha de quince partidos de Liga invictos que suman los blancos desde la derrota frente al Levante a finales de enero.

Con muchas bajas comparece también un Granada que no ha sumado frente al Real Madrid en Liga desde el curso 12-13, cuando un gol de Cristiano Ronaldo en propia puerta dio el triunfo al equipo que tutelaba Lucas Alcaraz. Desde entonces, los nazaríes han sucumbido en los once partidos disputados frente a los blancos, con un saldo de 37 goles en contra y solo cinco a favor. Diego Martínez tiene las ausencias por lesión de Neyder Lozano, Kenedy, Luis Milla, Carlos Neva, Jesús Vallejo, Montoro y Yangel Herrera, además de Soldado, sancionado. A ellos se unió Víctor Díaz, que este miércoles dio positivo por coronavirus. Las principales novedades respecto al equipo que cayó ante el Betis la pasada jornada son la entrada de Jorge Molina en la delantera y el regreso de Rui Silva bajo palos.

Apasionante fin de semana el

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Ya había avisado el Real Madrid de su intención de no especular con un estupendo centro de Rodrygo bien cabeceado por Benzema que se encontró con una gran respuesta de Rui Silva, rápido de reflejos en su vuelta al césped para salvar sobre la línea, cuando Miguel Gutiérrez, tan profundo por la izquierda como Marvin por la derecha, encontró un boquete a la espalda de Domingos Duarte y sirvió con

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