365 razones para amar Burgos inspiradas en la obra fotográfica de Santiago Escribano

Patricia Carro

Burgos

Domingo, 13 de septiembre 2020, 09:10

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Una ciudad son sus monumentos, sus plazas y calles, sus parques, sus ríos y zonas verdes. También sus infraestructuras, sus dotaciones culturales, científicas y artísticas, sus servicios o su industria, comercio y hostelería. Una ciudad viva es su gente, sus vecinos, sus visitantes. Todos los que la disfrutan en el día a día, pero también los que están de paso, la descubren y luego la comparten.

Burgos es una ciudad viva, que merece ser conocida, disfrutada y compartida. Y quiénes mejor que los burgaleses para presumir de su ciudad. De nacimiento o de adopción, 365 de ellos se han sumado a la última propuesta del fotógrafo y arquitecto Santiago Escribano, que vuelve a prestar sus creaciones para mostrar la riqueza artística, patrimonial y natural de la capital del Arlanzón.

El Teatro Principal acoge este lunes, 14 de septiembre, la presentación de 'Burgos 365 razones', un libro con una selección de las mejores imágenes de la trayectoria profesional de Escribano, aderezadas con reflexiones, recuerdos y emociones prestadas por un puñado de burgaleses, que han hablado de Burgos desde el alma, «con toneladas de cariño», afirma el fotógrafo.

La iniciativa surgió hace un año, aproximadamente, pero entonces era mucho más discreta. Escribano pretendía hacer un libro taco, de pequeñas dimensiones. Sin embargo, el proyecto fue ganando en ambición hasta convertirse en una publicación que recoge 635 instantáneas que pretenden «retratar una ciudad que me encanta», ha afirmado el fotógrafo burgalés.

Y es que Santiago Escribano se confiesa un enamorado de Burgos. «Los de Burgos somos muy de Burgos, nos gusta mucho nuestra ciudad y nos gusta decir que somos de Burgos, y eso está bien», insiste, frente a aquellos que pueden acusarle de 'chovinista' o presuntuoso. Burgos es una ciudasd muy amable para vivir, apunta, con mucha vida cultura, patrimonio y zonas verdes y una hostelería muy potente, así que «nos resulta muy fácil presumir de ella», admite.

Así que con las 365 imágenes seleccionadas, no todas inéditas porque se trataba de escoger las mejores (y porque el confinamiento también ha limitado la capacidad de buscar nuevos retratos), Santiago Escribano ha buscado a otros tantos burgaleses, nacidos en Burgos o emigrados a Burgos (pero que se han sentido muy bien acogidos) para que diesen sus razones para visitar, conocer, vivir, invertir en Burgos.

«Ha sido un camino muy bonito», reconoce, porque todo aquel al que se le ha propuesto participar ha dicho que sí sin dudarlo. Y la recepción de los textos también ha sido muy especial, pues muchos se han recibido durante el confinamiento. Además, el «lector» se va a encontrar todo tipo de escritos. Poemas, cuentos, textos elaborados por escritores y periodistas, pero también otros confeccionados por la mano de una abuela, o de los compañeros de cole de Rodrigo, el hijo del autor.

Escribano afirma que son estos «autores» los que dan sentido a la nueva publicación, que no es la primera de estas características que dieseña el fotógrafo. Antes vinieron 'Burgos, retrato urbano' y 'Burgos, luz tamiza', pero aquí Santiago Escribano ha bajado a la arena y ha tirado de emociones, de sentimientos, de recuerdos, de vivencias particulares que seguro que son compartidas por muchos burgaleses, orgullosos de vivir en la capital del Arlanzón.

Pues, precisamente el Arlanzón, es uno de los valores que más se destacan en el libro. También el centro histórico, con una gran vitalidad, que ha tomado en los últimos años gracias al impulso gastronómico, entre otros. 'Burgos 365 razones' recorre sus rincones (uno de los preferidos del autor es la plazuela de San Gil), pero también sus polígonos, pues una ciudad no es nada sin la potencia industrial que active su economía.

Santiago Escribano insiste en que 'Burgos 365 razones' es un libro muy positivo, que muestra Burgos a través de los ojos de los que la habitan, ojos amables como la propia ciudad. «Poder vivir en un lugar que tu consideras el mejor del mundo es maravilloso«, admite el fotógrafo, y en su caso personal no tiene dudas de que Burgos es ese lugar.