Una primera vuelta para la ilusión

Y eso que la temporada empezó con un sonoro tropiezo en los Anexos del Nuevo José Zorrilla. Allí, los hombres de Calero, se estrellaron de manera estrepitosa ante un efectivo Real Valladolid B, que a pesar de ser inferior durante buena parte del coque acabó llevándose la victoria con un solitario gol en la recta final.

Esa dolorosa derrota abrió un camino que no ha sido fácil, en el que el equipo ha ido de menos a más a medida que avanzaban las jornadas. Pronto, en la segunda cita del calendario, llegaría la primera victoria. Un triunfo muy sufrido y por la mínima ante el Sporting B que sirvió para enderezar el rumbo antes de que se aplazara el partido frente al Langreo.

Ese choque supuso semanas después la segunda derrota del cuadro blanquinegro ante un rival que aún hoy sigue peleando por la zona noble y que se ha convertido por méritos propios en un equipo a batir. Aquel fue, probablemente, el peor partido de los blanquinegros, que perdieron en El Plantío por 0-2.

Sea como fuere, el cuadro burgalés ha mantenido una buena línea, encadenando sendas victorias frente al Covadonga (1-2) y el Marino de Luanco (2-0), que le permitieron asomarse a los puestos de arriba. Más tarde llegaría un meritorio empate en casa de la siembre temible Cultural Leonesa (1-1) y la importantísima victoria frente al Numancia en El Plantío (1-0), con un golazo de Javi Gómez en la recta final del encuentro.

El Burgos había ido mejorando sus sensaciones y acabaría cerrando el año empatando con el Lealtad en tierras asturianas y superando con mucha solvencia al Andorra en la primera ronda de la Copa del Rey.

El sorteo copero deparó un duelo de altura frente al Espanyol en El Plantío para abrir el nuevo año, y a pesar de que los blanquinegros no pudieron pasar de ronda (0-2), dejaron muy buenas sensaciones sobre el verde. Unas sensaciones que se ratificaron, y de qué forma, ayer frente al filial del Real Oviedo.

Gracias a ese camino, el Burgos CF lidera ahora mismo el grupo con 17 puntos en su casillero, por delante de la Cultural (16 puntos) y el Langreo (15 puntos). Eso sí, el Real Valladolid B, próximo rival del cuadro burgalés, tiene un partido aplazado y cuenta con 14 puntos.

En todo caso, el Burgos ha demostrado ya su carácter competitivo, cimentado sobre una defensa ordenada y solvente, que apenas ha dado concesiones en lo que va de temporada. La línea formada desde el primer día por Álvaro Rodríguez, Míchel Zabaco, Unai Elguezabal y Rubén Lobato ha sido de lo mejor del equipo en estos meses. Los cinco goles en contra que acumula el equipo en nueve jornadas dan buena muestra de ello. De hecho, el Burgos es, junto al Lealtad y el Numancia, el equipo menos goleado del grupo.

Peores guarismos presenta el conjunto blanquinegro en el aspecto ofensivo. Y es que, la falta de gol ha sido una constante del equipo hasta el pasado fin de semana, y solo se han marcado 11 tantos. Tres de ellos, por cierto, los ha anotado Juanma, cuyo futuro en el equipo continúa siendo ahora mismo una incógnita. También ha marcado dos tantos el defensa Zabaco. La nómina de goleadores se completa con Saúl Berjón, Pisculichi, Javi Gómez, 'Mumo', Undabarrena y Guillermo.

Con todo, el resultado final de esta primera vuelta es más que satisfactorio, teniendo además en cuenta las características inéditas de esta temporada, con un calendario mucho más corto en la primera fase y con la vista puesta, además, en lo que sucede en el Grupo 1A, en el que el Unionistas se ha destapado, liderando la clasificación con 20 puntos.

La nota negativa, no obstante, sigue estando en el banquillo. Y es que, el Burgos, que en las últimas semanas ha visto cómo afloraban varios problemas económicos, aún no ha conseguido solventar el conflicto con Salmerón y Julián Calero todavía no ha podido dirigir al equipo en partido oficial. Y ya van nueve jornadas.