Mumo y Elgezabal, dados de alta tras pasar por el hospital

El cronómetro marcaba el minuto 70 de partido cuando se produjo la acción de manera fortuita. Elegezabal y Mumo saltaron para despejar de cabeza un balón, pero ninguno de los dos vio al compañero y chocaron duramente sus cabezas en el aire.

El golpe fue de tal envergadura que Maikel Mesa, jugador del Zaragoza, pidió que entrasen las asistencias antes de que los jugadores cayeran al suelo. Fueron minutos de tensión y preocupación, con los dos jugadores tendidos sobre el césped de La Romareda, que enmudeció.

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Las asistencias sanitarias presentes en el estadio entraron al verde para tratar a ambos jugadores, que presentaban sendas brechas en su cabeza. Mumo no pudo continuar el encuentro y Elgezabal paró su cambio cuando Jon Pérez Bolo le señalaba para que abandonase el terreno de juego.

El capitán completó el partido con un aparatoso vendaje en la cabeza que, como la herida de Mumo, precisó de puntos. La de Unai Elegezabal se saldó con once puntos, mientras que la de Mumo precisó de 19. Además, ya en el Hospital Recoletas Burgos, donde se realizó la sutura de las heridas, permanecieron unas horas en observación hasta que los médicos determinaron que su estado era óptimo para ir a sus casas.

Según indica el club, los dos futbolistas participarán en la sesión matinal de entrenamiento en la Ciudad Deportiva Kronospan. Además, el Burgos CF ha querido agradecer a los Servicios Médicos del Real Zaragoza su ayuda en la atención de ambos jugadores