El Burgos CF aún espera la llegada de seis o siete fichajes

De momento, el último entrenamiento de la semana ha estado participado por 18 futbolistas, quince de la primera plantilla y otros tres de la cantera (Miguel, Pol y Del Cerro). Falta por incorporarse Saúl Berjón, que continúa aislado en Oviedo tras haberse contagiado recientemente de covid-19. En principio, el jugador asturiano se incorporará al grupo en las próximas jornadas.

De esta forma, el primer equipo del Burgos CF ya cuenta con 16 jugadores profesionales, pero el técnico, Julián Calero, ha adelantado hoy que la intención del cuerpo técnico y la dirección deportiva pasa por contar con una plantilla de «unos 22 futbolistas profesionales». Esto es, que todavía quedan, al menos «seis o siete jugadores» por fichar.

En este sentido, el entrenador madrileño ha recordado que el club tendrá uno de los presupuestos más bajos de toda la categoría, lo que sin duda condicionará los movimientos. Aún así, «tenemos muchas alternativas» y «vamos a traer lo que más nos interese» aunque «no estemos los primeros en la parrilla para fichar». En todo caso, Calero ha insistido en que «no hay prisa», ya que el mercado está bastante estancado en general».

Lo que está claro es que el equipo necesita refuerzos «en todas las líneas», aunque la zaga parece bastante definida ya, con Míchel Zabaco, Unai Elguezabal, Aitor Córdoba, Grego Sierra, Álvaro Rodríguez y Fran García, amén del polivalente Raúl Navarro, que puede ocupar -y lo ha hecho durante mucho tiempo- alguno de los laterales. A partir de ahí, son necesarias incorporaciones en la portería, en el centro del campo y en la línea ofensiva.

Y todo ello con una idea clara: ser «competitivos». A este respecto, Calero ha subrayado que el «objetivo primordial» de la próxima temporada pasa por «salvar la categoría». «Tenemos que estar totalmente mentalizados y saber que vamos a tener dificultades», ya que «nadie nos va a regalar nada», ha reconocido. Sin embargo, ha añadido, «nosotros tampoco vamos a regalar nada. Que nadie piense que el Burgos vamos a ser los tontos. Vamos a ser un equipo competitivo y difícil», ha asegurado.

En todo caso, y a la espera de que el grupo termine de perfilarse, este mismo miércoles llegará la primera prueba de nivel. Será en Urritxe, donde el Burgos disputará su primer amistoso frente a la también recién ascendida SD Amorebieta. «Es la primera toma de contacto» que servirá para que el equipo se vaya «rodando» en el aspecto competitivo. «Competir bien siempre es importante», ya sea en plena campaña o en la pretemporada, ha afirmado Calero al tiempo que reconocía que tendrá que «repartir la carga de minutos» ante la falta de efectivos.