El Burgos CF no consiguió romper la mala racha en Oviedo, pero el equipo mejoró sus sensaciones. Así lo ha asegurado hoy en rueda de prensa Borja Sánchez, quien ha señalado que «se empiezan a ver brotes verdes».
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En este sentido, el atacante asturiano ha insistido en que «el equipo plantó cara» y «salió muy bien en un campo muy difícil» como el Carlos Tartiere. Tanto que, ha recordado, consiguió ponerse por delante en el marcador y disponer de «alguna ocasión para aumentar el marcador». Sin embargo, ha reconocido, el Oviedo empató el partido «en una acción a balón parado que se puede defender mejor».
Y eso es, precisamente, lo que está lastrando al equipo. «No nos hemos visto superados por el rival en muchos partidos», pero «el resultado se define por detalles» que «estamos trabajando para pulir», ha subrayado.
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En todo caso, Borja Sánchez ha afirmado que la mala racha del equipo tiene un fuerte componente mental. Tanto que, a su juicio, «en cuanto se gane, el equipo ganará confianza». «Le vamos a dar la vuelta pronto», ha asegurado poniendo como objetivo el partido del próximo fin de semana frente al Sporting de Gijón.
Un rival complicado, que «está haciendo las cosas bien», pero al que se puede ganar. De hecho, «esta plantilla está preparada para ganar a cualquier rival», ha subrayado al tiempo que insistía en dar plena confianza al nuevo cuerpo técnico.
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