Las quejas de los alumnos de la Universidad de Burgos por la gestión de la covid-19 saltan a las redes sociales

Desde la Universidad de Burgos se les ha pedido que se adapten a las nuevas circunstancias pero, afirman los alumnos, ha sido la propia institución la que no ha tenido capacidad para ello. Hay profesores que sí, reconocen, pero otros muchos todavía no han modificado la guía docente, siguen gestionando la materia como antes de la suspensión de las calles, realizan clases online muy largas o saturan de trabajos sin explicar cómo se van a evaluar.

Insisten en los alumnos en que el profesorado está más preocupado por los exámenes, cómo hacerlos y cómo evitar que se copie, que de facilitar el acceso a los contenidos y garantizar que se aprenda y no se pierda parte del curso por la crisis de la covid-19. La inquietud llega también a los alumnos de TFG, con problemas de acceso a bibliografía y falta de información sobre criterios de evaluación.

Desde la Universidad de Burgos, el pasado martes se aprobó el documento 'Criterios generales para la adaptación de la enseñanza y de la evaluación a la modalidad no presencial', que incluye el escenario de enseñanza y evaluación telemática a través de la plataforma 'UBUVirtual', ya sea online o a distancia, para lo que resta de curso académico.

La UBU exige a su profesorado que modifique la guía docente, y lo dé a concer al alumnado, y que se establezcan procedimientos de evaluación continua telemática, dejando claro qué se evaluará y cómo. También, que se adapten tareas docentes y pruebas a la nueva situación y que se trata de facilitar la conciliación y se tengan en cuenta las problemáticas del alumnado, como consecuencia de la crisis sanitaria.