El skatepark de San Isidro, ocho años de abandono y un peligro para los usuarios

Aquel año se abrió al público todo el conjunto del parque de San Isidro, en la zona sur de Burgos, en el que está la zona de skate, tirolinas, mesas, bancos, un mirador y una zona de esparcimiento canino. El Ayuntamiento invirtió un total de 863.400 euros en todo el proyecto.

Sin embargo, desde entonces la instalación deportiva no ha tenido ninguna reparación, ni apenas mantenimiento, relata Sardiña. «Ningún Ayuntamiento de los que ha estado, tanto de un partido como de otro, ha sido capaz de venir a esta instalación deportiva y ver sus necesidades», detalla, aclarando que desde que se inauguró solo ha ido a peor.

Con el tiempo, el deterioro se ha acrecentado, hasta llegar a un punto en el que hacer deporte allí «es peligroso». «Van a hacer que 863.000 euros queden en el olvido y vayan a la basura», explica acerca de la inversión de hace ocho años que, si no se mantiene la pista, acabará, probablemente, desperdiciándose.

El estado del firme es uno de los principales problemas del skatepark San Isidro. La pista presenta grietas, piezas metálicas sueltas y placas de hormigón roto. Asimismo, los grafitis suponen un peligro para los deportistas que utilizan la instalación, entre los que se suman skaters, patinadores, usuarios de patinetes y bicicletas tipo BMX.

«Cada semana» aparecen nuevos grafitis, aclara Sardiña. Y el problema es que, cuando los deportistas entrenan, circulan a gran velocidad y las ruedas, con el roce de la pintura, resbalan. «Es un peligro», repite el usuario.

Además, la zona, al no estar protegida y abierta durante las 24 horas, por la noche se convierte en un punto recurrente para hacer botellón. «Todos esos cristales acaban en la pista», detalla Sardiña acerca de las bebidas. Estos pueden causar graves problemas a los deportistas ya que, si se caen, se los pueden clavar y tener que acudir al hospital, como ya ha ocurrido en varias ocasiones.

Por todos estos motivos, Sardiña denuncia la falta de limpieza de la pista de San Isidro, explicando que nunca ve brigadas de aseo urbano del Ayuntamiento por la instalación. Por ello, él y otros usuarios llevan cada día a la pista una escoba y un recogedor, para limpiar ellos mismos el skatepark. Una situación que «no es normal».

Por otro lado, Sardiña comenta que el que la pista no esté vallada favorece que por la noche acudan personas a hacer botellón hasta el skatepark, provocando la suciedad que luego ellos se encuentran. Otro de los problemas que denuncia es la inseguridad que viven en ocasiones, porque han llegado a sufrir atracos y robos, teniendo que llamar a la Policía Local en múltiples ocasiones.

Además, explica que hay padres que han dejado de llevar a sus hijos a la pista de skate de San Isidro por estas condiciones. Sardiña asegura que «la mala situación» y la presencia de suciedad y cristales ha hecho que muchos niños y niñas hayan dejado de practicar estos deportes en la zona, cada vez más populares en la sociedad.

«Es cuestión de poner un poco de interés» por parte del Ayuntamiento, señala Sardiña. Se puede dejar la instalación «en perfecto estado» y no por mucho dinero, explica. «La pista es igual que una cancha de baloncesto, de futbito o un polideportivo», agrega, aunque el estado de alguna de estas instalaciones, como el polideportivo Javier Gómez, también deja que desear y tiene sus propias deficiencias, según explican sus propios usuarios.

A la pista de skate de San Isidro acuden, cada día, decenas de usuarios de todas las edades a aprender y pacticar varios deportes. Sin embargo, para algunos deportistas que compiten a nivel nacional o internacional la pista no es adecuada, por lo que deben acudir a otras ciudades a entrenar o competir.

La pista burgalesa es una de las mejores del país en cuanto a su diseño e instalación. Sin embargo, en cuanto a su cuidado y mantenimiento, en algunos foros de internet de aficionados al skate ya es considerada como «la instalación más abandonada de España», relata Sardiña, quien reconoce que es un espacio «con muchas posibilidades».

«La selección española de BMX quiere venir aquí a entrenar, pero es imposible», cuenta el usuario. Asimismo, el Comité Nacional de Skateboarding ya intenó organizar un circuito nacional en esta pista de Burgos en 2022, pero «la falta de apoyo del Ayuntamiento» lo imposibilitó. Otras agrupaciones como la Federación de Ciclismo, la de Patinaje o el Comité les apoyan en su lucha para conseguir las reparaciones necesarias.

«No podemos permitir que el Ayuntamiento la deje en el olvido. No podemos permitir otro abandono como el velódromo», aclara, responsabilizando directamente de la situación de San Isidro a Ayala, Barriada y Yudego. Además, Sardiña pide a los representantes «que dejen de engañar a los burgaleses y burgalesas queriendo construir nuevas instalaciones si las que están construidas las tienen abandonadas. No hay derecho», sentencia.

Por otro lado, detalla que han puesto repetidas quejas en el servicio de atención ciudadana 010, y pide al resto de usuarios, deportistas y habitantes de Burgos que se sigan quejando formalmente al Consistorio para que revierta la situación del skatepark.

Mucho antes de que el skatepark y su predecesor, el circuito de motocross, existieran, esta zona de Burgos ya se denominaba el cerro de San Isidro. Sin embargo, en septiembre de 2022 el partido político Vox propuso al Ayuntamiento de Burgos cambiarle el nombre a esta pista de patinaje.

El «nuevo» nombre escogido era Ignacio Echeverría, en honor al skater asesinado en los atentados de Londres de 2017. A pesar de que el Ayuntamiento inició el expediente hace dos años, este cambio aún no se ha formalizado y el skatepark sigue llamándose San Isidro.

Sin embargo, esta nueva denominación no convence a los usuarios de la instalación deportiva hasta que el espacio no esté en condiciones de merecerlo. «Quieren apropiarse de un representante del skateboarding, un héroe nacional para nosotros, cuando la instalación está abandonada. ¿En qué cabeza cabe?», concluye indignado Sardiña.

Burgosconecta ha intentado ponerse en contacto con el concejal de Deportes, César Barriada, para conocer la postura del Ayuntamiento ante esta situación pero no ha obtenido respuesta.

En el pleno del 17 de febrero de 2023, el Ayuntamiento de Burgos aprobó un plan director para revisar y mejorar la zona Sur de Burgos. En él se incluían zonas como el aparcamiento de la calle Alba de Tormes, el aspecto de la plaza Doctor López Sáiz y el entorno del cerro San Isidro, donde se ubica el skatepark. «Da sensación de verdadero abandono y falta de mantenimiento», se comentaba sobre San Isidro en el acta.

Este Plan Director fue aprobado en la anterior legislatura por los partidos PSOE, Ciudadanos, PP y Vox. Sólo se abstuvieron los dos concejales de Grupo en Burgos Podemos. Sin embargo, ni el skatepark ni la zona en la que se ubica han cambiado desde entonces.