El edificio de Progreso 14, en la esquina de esta calle con la de San Pablo, está en estado de ruina desde hace una década y la inacción de los propietarios, ante los múltiples requerimientos del Ayuntamiento, pone en riesgo a la ciudadanía. Esta circunstancia, ... unida a la falta de jurídicos en el área de Licencias, hace que no quede amparada la seguridad para las personas que paseen por la zona, incluso para los vehículos.
Publicidad
El inmueble, según la información recogida en Licencias, es «propiedad de una empresa en concurso de acreedores» y en liquidación –Aragón Izquierdo- y de otro particular que no han atendido las demandas realizadas por la Administración local en varias ocasiones desde el año 2011.
Es más, los propietarios fueron multados en varias ocasiones por no atender a esos requerimientos que, en esencia, eran la mejora de los miradores exteriores por estar muy deteriorados. También recibieron las correspondientes sanciones por aspectos impositivos y tasas.
La realidad es que a día de hoy el edificio está totalmente abandonado y «sin mantenimiento», con lo que los peligros se multiplican sin que nadie pueda, por el momento, mover un papel para evitarlo.
Desde Licencias se recuerda que la constructora, antes de caer en concurso y de la crisis económica, «presentó un proyecto de 30 viviendas», con sus correspondientes garajes, locales y anejos. Pero el 'crack' del ladrillo pulverizó los planes de la empresa. Los arrendatarios y propietarios de locales los abandonaron y el inmueble quedó en la ruina técnica.
Noticias relacionadas
Gabriel de la Iglesia
Gabriel de la Iglesia
El estado del edificio no sólo afecta al área de Licencias; también al de Medio Ambiente. Desde esta área se ha tratado de intervenir en muchas ocasiones porque el deterioro del inmueble ha sido muy grande; se ha acumulado mucho escombro y basura y las palomas, gatos y otros animales han colonizado el espacio.
Publicidad
Según la información recabada en el Ayuntamiento, en esta ocasión la propiedad del edificio tampoco permitió la entrada de Medio Ambiente para su limpieza. El lugar ha sido también un espacio en el que ha dormido transeúntes y en una ocasión tuvieron que actuar los Bomberos por un conato de incendio.
¿Qué solución queda? Si el Ayuntamiento quiere preservar la seguridad y evitar que el inmueble se caiga solo, tiene que realizar una ejecución subsidiaria. ¿Tiene capacidad y medios el Ayuntamiento para realizarlo? Pues ante la pregunta, desde Licencias se aclara: «Lo puede hacer el Ayuntamiento con sus medios». Sin embargo la precariedad de personal en el Área de Licencias (de los cinco jurídicos solo tiene uno) impide llevar la ejecución a cabo.
Publicidad
¿Qué se puede hacer, entonces? Por el momento nada. La paralización orgánica del Consistorio con la alarmante falta de profesionales impide implementar acciones. «la tramitación es tan larga y laboriosa que necesitaríamos a todos los jurídicos, los cinco; y no los tenemos», sentencian desde Licencias.
La ficha 739 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Burgos mantiene una especial protección sobre este edificio de calle Progreso 14.
La norma exige «el mantenimiento, con carácter general, de la fachada o fachadas a calle, o al menos de sus elementos más característicos». Respecto a la envolvente exterior del edificio, «se mantendrá la altura y número de plantas existentes y la configuración actual de cubierta; pero se admite modificar la profundidad edificable.
Publicidad
Lo detalla más: «Como consideración general se deben mantener los principales elementos y la composición de la fachada conservándose el muro y su formalización de huecos, el zócalo o basamento, el tipo de material de acabado y el criterio general de color, el hueco de acceso principal y eliminándose, los rótulos o banderolas; permitiendo así el mantenimiento de los valores tipológicos originales».
Por ejemplo se deben mantener «los miradores o cuerpos volados existentes» y en el local existente en planta baja se debe devolver el carácter originario de su acceso, recuperar el carácter original de los escaparates por haberse realizado sustituciones inconvenientes, para así resultar coherente con la fachada y el espacio urbano».
Publicidad
El inmueble actual data de 1934. Se trata de una parcela de 510 metros cuadrados de extensión y hasta hace apenas 14 años tenía tres inmuebles comerciales; tres inmuebles de hostería (pensiones). Y siete viviendas que oscilaban entre los 159 metros cuadrados las más grandes a los 39 de la más pequeña.
Su ubicación en la confluencia de las calles Progreso, San Pablo, San Julián y frente a la calle del Tinte, convierte a este espacio urbano en un lugar idóneo para que un desarrollo urbanístico que embellezca esta parte de la ciudad.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
La proteína clave para la pérdida de grasa
El Comercio
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.