Resignación a la espera de la llegada del Ave, que se retrasa hasta 2022

Ese es el calendario con el que trabaja ahora mismo el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) después de que hayan finalizado los trabajos de construcción de la línea y de adaptación del nuevo andén en la estación Rosa de Lima, así como parte de las pruebas de seguridad.

Sin embargo, todavía queda pendiente la materialización de más pruebas de circulación, en este caso las vinculadas al sistema ERTMS, que se prolongarán durante varios meses. De hecho, la previsión, a la vista de experiencias anteriores, es que se prolonguen hasta finales de año.

Eso sí, en principio, la realización de esas pruebas, que analizan la seguridad en la circulación de trenes a más de 300 kilómetros por hora, no se verán afectadas por la adquisición de nuevos trenes por parte de Renfe, los cuales todavía no han entrado en funcionamiento.

Sea como fuere, y sin querer dar una fecha concreta, todo apunta a que hasta principios de 2022 no se comenzará a comercializar la línea, aunque Fomento se ha comprometido a que la puesta en servicio sea inmediata una vez superadas las pruebas.