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Después de lo ocurrido hace unas semanas con Dani Alves todo el mundo habla de la posibilidad de tener o crear un protocolo de actuación en los locales de ocio nocturno ante una agresión sexual. En Burgos, hasta ahora, ese protocolo no existe, reconoce Juan ... Antonio Llorente, gerente del Sohho y presidente de la Asociación de Hostelería de Ocio Nocturno Burgos.
«Lo único que recibimos es que podías adherirte a los puntos violeta», unos distintivos morados para el comercio y la hostelería de la capital que pretenden identificar aquellos establecimientos que manifiestan abiertamente su lucha contra la violencia de género. «Pero era algo un poco extraño, sin formación y sin nada. Una cuestión muy bienintencionada pero sin ningún respaldo. Era como si pusiera el punto violeta en tu local ya parecía que tenías relevancia contra estas cuestiones, yo no lo veía y no lo he puesto», confiesa Juan Antonio Llorente.
Eso no le impide repudiar toda violencia contra la mujer, expuesta, más si cabe, a comportamientos intolerables cuando el alcohol aparece en escena. «En el ocio nocturno siempre hemos tenido ese cuidado con nuestras empleadas, desgraciadamente hay personas que pierden un poco el respeto cuando consumen alcohol y el personal femenino muchas veces es el que puede ser afectado. No estamos hablando de una violación o una agresión sexual, pero desde luego ha habido, y seguirá habiendo, situaciones de incomodidad, de falta de respeto e incluso podemos hablar de cosas denunciables», sentencia.
Para Juan Antonio no se tratan «de cosas menores» por eso está abierto a todo aquello que pueda sumar en la lucha contra las agresiones. En Valladolid la Asociación Más que Bares ha creado un protocolo para casos de agresión sexual que presentará el lunes en el Ayuntamiento de la ciudad pucelana, algo que para el presidente de la asociación burgalesa no deja de ser llamativo. «Es un poco el mundo al revés, es el ocio nocturno el que toma las riendas de estas cuestiones sin tener preparación ni siquiera la capacidad para ello. ¿Quién puede dar una formación? Las instituciones, ¿quién si no? Es bastante curioso que las iniciativas surjan desde el ocio nocturno, que justamente somos los que siempre hemos estado de alguna manera pendientes de esta cuestión, porque esto no es nada nuevo. El Ayuntamiento y la Junta son los que tienen las competencias. Que en una ciudad como Valladolid se haga a instancias de los hosteleros, pues es una buena noticia, pero por otra parte es muy significativo de cómo funcionan las cosas», reflexiona.
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Porque en el mundo de la noche se ha asumido como normal la presencia de «pesados», algo que desde el ocio nocturno también quieren erradicar. «Por ahí se empieza. Un pesado se puede convertir en otra cosa en muy poco tiempo. La cuestión está en que quede claro desde un primer momento que el pesado no tiene cabida en el ocio y que si es pesado se vaya a su casa y sea pesado consigo mismo».
Aunque no entiende muy bien la utilidad del punto violeta tal y como está planteado, Juan Antonio sí lo «agradece». «Si tuviese un poco de respaldo y de información no sería una iniciativa mala. Por lo menos hay un camino un poquito marcado, igual que tenemos los cursos de formación con los que nos están abrasando constantemente, que además son deducibles con la Seguridad Social, ¿por qué no puede ser esto lo mismo? Un curso de formación que de alguna manera esté muy incentivado para que todo el mundo lo haga, porque yo entiendo que obligatorio no puede ser, aunque no me parecería tampoco mal, pero incentivado como los demás cursos sería perfecto. Estaríamos encantados de participar, y hay un cauce que ya está hecho, tampoco sería muy complicado», indica.
Porque los hosteleros burgaleses del ocio nocturno estarían encantados de poder poner su granito de arena para evitar agresiones sexuales en momentos de diversión. «La infraestructura de los cursos está más que contrastada después de años y años de formaciones, es hacer un curso más, las empresas que hacen estos cursos ya existen y sería algo rápido y eficaz. Solo hay que buscar los formadores adecuados. Es un tema que lleva sucediendo tiempo, parece que es de ayer, desde que han metido al futbolero en la cárcel, pero esto llevamos años escuchando cosas de estas, de acosos, de violaciones, si no en los locales fuera de los locales, pero no es nada nuevo», finaliza.
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