Hay números, códigos, cifras diferentes que simbolizan cosas diferentes. El 947 es uno de ellos. Con sólo enumerar los dígitos todos los burgaleses conocen que ese número es el de la provincia. Más aún desde hace más de dos décadas cuando al número sencillo [las seis cifras que le acompañan] hubo que sumar el código provincial. La provincia cuenta con 252.620 líneas fijas y el total de España, 32.572.396.
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La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha llevado a cabo un estudio acerca de una eventual ampliación de los códigos telefónicos. Las conclusiones de la memoria han determinado que Burgos, como el resto de las provincias de España, «no necesita a corto plazo» la ampliación de su código.
El 'Informe anual sobre el estado de la numeración' que realiza el organismo, este año no se prevé el agotamiento de la numeración disponible debido a las medidas preventivas adoptadas.
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Es cierto que la provincia de Burgos presenta un limitado número de bloques libres disponibles para asignar nuevas terminales y requiere de un seguimiento continuo.
En el fondo de la cuestión está la adopción de medidas en materia de numeración para administrar adecuadamente «la demanda creciente de numeración geográfica, prevenir el agotamiento de los identificativos de red móvil (IRM) ante la futura de demanda por el uso en autor estación para servicios 5G y agilizar la gestión de las subasignaciones de numeración fija».
En el comunicado de la CNMC se subraya que la asignación en bloques de mil números que se realiza desde 2021, ha permitido «ajustar mejor las asignaciones» a los operadores.
Burgos tiene asignados 1.100 bloques de los que tiene ocupados 951 y 149 libres con lo que la urgencia no es perentoria, aunque sí vigilable. Sin embargo, provincias como León, Cáceres, Málaga, Albacete y Valladolid, «presentan un número limitado de bloques libres». A León le quedan 106 y a Valladolid 119 de las 1.200 con las que cuentan como límite.
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Los más veteranos aún recordarán que bastaba con marcar seis dígitos en el teléfono fijo para establecer una llamada provincial. Eso sí, para hacerlo fuera de la provincia, había que adjuntar al número el prefijo. La serie del 94 era para el noreste de la Península -Cantabria, País Vasco, Navarra, La Rioja y Burgos- a ese 94 se le adjuntaba, según la provincia otro dígito -el 1, a La Rioja, el 2, Cantabria; el 3, Guipúzcoa, el 5, Álava; el 8, Navarra y a Burgos, el 7; Vizcaya llevaba exclusivamente el 94 al que se adjuntaba el 4 y el 6 por su amplia distribución.
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