Buscan identificar a las víctimas de la represión enterradas en la fosa común de Burgos para homenajearlas con una placa

Se trata de una tarea ardua pues, según los datos que maneja la coordinadora, habría 600 personas enterradas en la fosa común, procedentes de diferentes puntos de España, explica la presidenta de la organización, Soledad Benito. Gracias al trabajo que ha hecho uno de los socios, investigando en todo tipo de documentación, disponen de un listado con alrededor de 300 nombres, muy insuficiente para poder dar respuesta al total de víctimas.

De ahí que la coordinadora haya iniciado una campaña para intentar localizar a familiares de personas represaliadas que puedan estas enterradas en la fosa común de Burgos. Son víctimas de la Guerra Civil y del Franquismo, pues hay fusilados de 1936 a 1945, explica Benito.Se hace un llamamiento público tanto a familiar como a asociaciones y colectivos de memoria histórica, para llegar a todos los puntos del país y tener el mayor número posible de nombres confirmados, aun siendo considentes de que siempre habrá fallos y que, de momento, será imposible completar la lista.

Benito explica que, cuando se aborde el diseño de la placa, se dejará suficiente espacio para seguir añadiendo nombres que vayan llegando, pues una vez lanzado el llamamiento están convencidos de que irán apareciendo víctimas en meses próximos. De momento, la coordinadora ha iniciado este proyecto, pero sin fecha concreta para colocar la placa, pues también están pendientes de la convoctoria de ayudas de la Junta de Castilla y León.

A causa de la crisis sanitaria de la covid-19 se han paralizado las subvenciones, comenta la presidenta de la coordinadora, pero el proyeto se presentará cuando se abra la convocatoria. También están a la espera de la ayuda anual comprometida por el Ayuntamiento de Burgos, aunque en este caso se destina a continuar con las identificaciones de los represaliados del Monte de Estépar.

Se consiguieron recuperar 96 cuerpos, que se inhumaron en el panteón homenaje del cementerio de Estépar. Sin embargo, solo se han conseguido identificar 5 restos, recuerda Benito, pues falta financiación. «Las identificaciones se llevan mucho dinero», afirma la presidenta, y les falta liquidez para afrontarlas, aunque se va haciendo con las ayudas que van llegando, aunque sea a cuentagotas.

Este año, además, tampoco habrá nuevos proyectos de excavaciones, aunque se continúa con otros pendientes, como la fosa de Ibeas de Juarros. Allí se exhumaron el pasado verano 7 restos, correspondientes a presos de Burgos que salieron de la capital con destino el penal de Pamplona pero nunca llegaron, pues fueron fusilados y enterrados a orillas de la N-120. En este caso también están pendientes las identificaciones.