Fallece a los 69 años el histórico líder sindical de Burgos Raúl Sierra

Cuando se han cumplido (14 de diciembre de 1988) 20 años de la primera huelga general de la democracia española, Sierra abandona la tierra en la que ha forjado un sentimiento de unidad en la lucha. De carácter y convicciones fuertes, fue secretario general de Comisiones Obreras desde 1993, un servicio a la clase obrera en el que estuvo hasta 2004.

Con su compañero de fatigas y afanes, su homólogo en UGT Julián Juez, negoció centenares de convenios en las etapas más duras de la lucha sindical. Abanderó huelgas y negociaciones llevando el sentir de sus compañeros y compañeras hasta el final. Los dos eran personas respetadas por la patronal y los sindicatos.

Sierra ha sido un hombre que ha llevado grabado a fuego la lucha por los derechos de los trabajadores; en su etapa más comprometida peleó por convenios que aún hoy perduran en el tiempo. Por sus venas corría sangre de libertad, de justicia y de solidaridad. Aquellos que convivieron con él en su época lo recuerdan con cariño de esta manera.

Obrero de Ubisa desde 1976, empezó como sindicalista de CNT en la fábrica de Villalonquéjar. Posteriormente, tras una traumática ruptura del sindicato anarquista, se afilió a CC OO, donde ya conocía a otros históricos dirigentes como Paco Ubierna y Leandro Alzaga. Fue delegado sindical y secretario de organización de Comisiones.

Sierra había sido fundador con apenas 20 años de la CNT con un grupo de compañeros de la clase obrera. Durante su militancia activa en la CNT, Raúl Sierra estuvo como representante de ese sindicato en decenas de mítines y reuniones, como el celebrado en el recinto del solar de Caballería, el 23 de julio de 1976.

Sus compañeros sindicalistas recuerdan con cariño la emoción que suponía participar en eventos como el del año 76; pero también las huelgas generales, empezando por la de 1984, con la USO; la recordada de 1988 y las posteriores. Otros compañeros y amigos de otras fuerzas sindicales apuntan que Raúl Sierra defendía como nadie la huelga general.

Sin embargo, en su trabajo al frente de CC OO siempre se caracterizó por la conciliación y el diálogo y fueron, entre patronal y sindicatos, capaces de negociar expedientes de regulación de empleo de manera ejemplar; la mayor parte de ellos desde la conciliación y el acuerdo.

Los problemas también le llegaron con algunos despidos dolorosos de compañeros y compañeras en Fabisa, el cierre de la química fotográfica Valca en Valle de Mena; la Plastimetal y sus conflictos que acabaron con el cierre también; Ansa en Burgos…

Desde su espíritu libre y conciliador, Raúl Sierra deja muchos amigos –y enemigos de entonces, ahora reconciliados— que reconocen la valía de un hombre valiente, arriesgado y amante de una clase obrera que le recuerda con cariño.

Los últimos meses era habitual ver a Raúl tomarse un vino a mediodía por los establecimientos de la calle San Gil y Avellanos, siempre amable y con su cigarrillo saludando a todos.

Su esposa, Isabel, su hija, Andrea y sus dos luceros a los que amaba con la misma devoción que a ellas, sus nietos Lucía y Adrián, lloran hoy su partida al otro mundo; el de aquellos que nunca mueren porque están en el corazón y el recuerdo de aquellos a los que se ama.

La dirección y redacción de Burgosconecta se unen al dolor de la familia de Raúl Sierra. Hoy vienes se celebra un acto de despedida en la Sala Multiconfesional del Tanatorio de San José y acto seguido su incineración. Descanse en paz.