Exigen la dimisión de la gerente de Atención Primaria por su falta de previsión y su «desprecio» a los médicos

Obligar a los médicos de familia a realizar una jornada complementaria de 14 horas en el Punto de Atención Continuada de Gamonal (PAC) es la última de las medidas, unilaterales, impulsada por la Gerencia para tratar de hacer frente al grave problema de escasez de personal en Burgos. Sin embargo, es un «parche» que agrava la situación de precariedad y sobrecarga laboral de los médicos.

Así lo explica Pablo Oyagüez, presidente de la Junta de Personal, tras la reunión de urgencia mantenida esta mañana con la Gerencia de Atención Primaria, que ha sido «poco fructífera». La petición que se ha puesto sobre la mesa ha sido rectificar en la decisión tomada para cubrir las guardias en Gamonal y abrir un periodo de reflexión para encontrar una salidad dialogada y consensuada con los trabajadores.

Sin embargo, la gerente insiste en que la única solución posible es la que se ha implantado a principios de año pues, de lo contrario, se tendría que cerrar el punto de atención continuada. Una afirmación que no comparte Oyagüez, quien además critica que se esté criminalizando a los médicos y se les responsabilice de las consecuencias de la nefasta gestión que se está haciendo desde la Gerencia.

«Lo que no puede ser es querer hacer el mismo trabajo pero con menos personal», apunta el portavoz de la Junta de Personal. La escasez de efectivos, derivada de la jubilación por edad de los facultativos, se ha agravado por la falta de respuesta efectiva de la Gerencia. Se ponen parches, como los acúmulos de consulta, pero no se invierte en incentivar los puestos de difícil cobertura, así que falta relevo generacional y los profesionales prefieren trabajar en otras provincias.

Y la situación no va a mejorar en los próximos meses, asegura Pablo Oyagüez, pues están previstas 28 jubilaciones este 2019 pero solo 5 nuevos contratos. Así que la medida de cubrir las guardias de urgencias de Gamonal con médicos de familia no será provisional, sino que se mantendrá en el tiempo y, por ese motivo, la renuncia de las tres médicos de Los Cubos podría tener un «efecto dominó».

Desde la Junta de Personal apoyan y respetan la decisión de Pilar Obregón, Sonia Andrés y Nuria Adrián, pues es una decisión «muy valiente pero muy dura». Su marcha es una pérdida para el conjunto de la sanidad en Burgos, pero hay que entender también que su renuncia no buscaba una solución individual, sino que es un toque de atención a la Gerencia pues la situación es «insostenible».

Oyagüez ha explicado también que, una vez más, se ha pedido a la Gerencia de Atención Primaria un proyecto global para reorganizar la asistencia sanitaria en Burgos. La solución no puede pasar por sobrecargar de trabajo a los profesionales, moverles de un servicio a otro para cubrir necesidades y acusarlos de «chantajistas» cuando dicen que están hartos y que ya no pueden más.