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Ahora sí que sí. La Diputación Provincial puede cerrar el expediente de Castañares. Más de siete meses han pasado desde que el Ayuntamiento de Burgos les solicitase solución tras la marcha de la junta vecinal, que había presentado su dimisión en noviembre harta de ... ser ninguneada por el Consistorio. El proceso ha sido tortuoso y, sobre todo, muy exigente para los técnicos provinciales, pero ya ha concluido.
El Pleno de la Diputación ratificaba ayer el nombramiento de Luis Flores como alcalde pedáneo-gestor de Castañares. Ha sido el único candidato que se ha presentado, en este caso de la mano de Imagina, y asumirá las funciones de gestor hasta que se convoquen las elecciones municipales de 2019 y se elija una nueva junta vecinal. Previamente, su nombramiento era ratificado esta semana en comisión provincial.
Ahora, la Diputación comunicará formalmente el nombramiento al Ayuntamiento de Burgos, para que lo ratifique y proceda al acto de toma de posesión. A partir de ese momento, la pedanía de la capital volverá a contar con una cabeza visible, que podrá nombrar vocales de apoyo. Dadas las características particulares de Castañares, como entidad local menor de un municipio tan potente como Burgos, la fórmula diseñada ha sido la de alcalde-gestor y no la de gestora, propiamente dicha.
En todo momento, la Institución Provincial ha seguido los pasos marcados por la Junta Electoral Central. En primer lugar, se llamó al Partido Popular, como formación más votada en las elecciones de 2015, para que presentase candidato. No lo hizo, así que se abrió al resto de las formaciones con representación en el Ayuntamiento de Burgos. La Junta Electoral Central no permitió que un candidato se presentase por libre, así que Imagina tomó cartas en el asunto.
Convocó una asamblea vecinal en la pedanía y presentó su candidato, aunque finalmente en el debate ser presentaron otros dos y los vecinos dieron su apoyo a Luis Flores. Marco Antonio Manjón, como portavoz del grupo provincial de Imagina, hizo la presentación formal del candidato y, a finales de julio, la Diputación inició los trámites para su nombramiento, que finalizaron ayer en el Pleno mensual.
El objetivo de la Institución Provincial ha sido defender la integridad de la entidad local menor; es parte de su responsabilidad pero se ha convertido en algo más en este caso concreto. Y es que si el proceso se hubiera cerrado sin gestor, el Ayuntamiento podría haber iniciado los trámites para convertir Castañares en un barrio, algo que precisamente no les gusta a los vecinos de la pedanía.
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