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La Policía Local de Burgos ha detenido a un hombre, por vulnerar una orden de alejamiento de una mujer. Esta orden se dictó al estar condenado por violencia de género. Además, cinco días después, se detuvo a otro varón al ser alertada la Policía de un presunto caso de violencia de género.
La primera de las detenciones tuvo lugar el martes 15 de octubre a medianoche. Tras recibirse un aviso al 112, que alertaba sobre un vehículo que se encontraba en la confluencia de las calles Marqués de Berlanga y Condes de Haro, en la vía pública, con las puertas abiertas y música a todo volumen.
Tras identificar a cuatro personas que se encontraban en el lugar -dos hombres y dos mujeres- se verificó en la sala 092 de Policía Local que uno de ellos tenía en vigor una orden de alejamiento dictada por un juzgado de violencia de género, sobre una de las mujeres allí presentes. Esta orden le impedía aproximarse a menos de 200 metros de ella. Por tales motivos fue informado de los motivos de su detención.
Hace unos días se conocía también en la ciudad de Burgos otro caso en el que, tras una trifulca en la calle, acabó en el calabozo al tener una orden de detención dictada en un juzgado de Vitoria.
La segunda detención tuvo lugar el domingo 20 de octubre al recibir una llamada en el 092 sobre las 21.10 horas desde la calle José Zorrilla, informando de un presunto caso de violencia de género. Llegados al lugar, se pudo verificar que el varón de 30 años tenía una reclamación policial motivada por una denuncia y los agentes de Policía Local procedieron a su detención.
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