Denuncian grandes goteras en el polideportivo Javier Gómez

«Sucede cada día que llueve», señala Alba Santamaría, entrenadora del club de baloncesto Babieca y usuaria del polideportivo Javier Gómez. Las instalaciones, situadas en el parque Virgen del Manzano, también son utilizadas a diario para hacer educación física por los escolares del colegio Antonio Machado.

Por tanto, cada día que llueve en la pista de este polideportivo se forman charcos que impiden a los deportistas utilizar el campo con tranquilidad. «Supone un grave peligro», advierte Santamaría, ya que algunas de las deportistas que entrenan allí tienen en torno a siete años. Además, indica que, cuando esto ocurre, la parte del campo mojada no se puede emplear para que no «tropiecen y caigan», con el consiguiente perjuicio para su entrenamiento.

En cada polideportivo hay trabajadores municipales que se encargan de su mantenimiento, de abrir, cerrar y otras tareas. Cuando llueve, Santamaría explica que los empleados «se limitan a secar la pista con cartones y fregonas».

Sin embargo, este no es menester de un día; sino que se repite desde hace unos diez años. En ese tiempo, la entrenadora ha hablado con los empleados del polideportivo acerca de la situación y señala que ellos «dan parte al Ayuntamiento para que lo solucionen». Pero, como explica, «la solución no llega». Esta situación también se repite en el polideportivo Lavaderos, donde también aparecen charcos provocados por las goteras cada vez que llueve.

Asimismo, Santamaría aqueja también que la calefacción en el polideportivo Javier Gómez de Burgos es deficiente. «Hemos llegado a estar a -1 ºC dentro de la instalación», señala. En ese momento, si además ha llovido, indica que el agua del suelo caído por goteras es «prácticamente hielo».