Burgos despedirá a Adrián y a Luna con un funeral y un homenaje

La ciudad de Burgos, se une así a la despedida de Adrián y su perra Luna con este gesto en el que se une el cariño de mucha gente en el adiós a esta tierra de este hombre y su 'alter ego'. Los gestos de cariño y recuerdo con los dos se han disparado desde el pasado sábado. Un altar improvisado se puso en el mismo lugar en el que los dos aguardaban la generosidad de la gente.

Como se recordará Adrián, que era un hombre de 51 de origen rumano que llevaba una década en Burgos, y su perra Luna fallecían este viernes en el pavoroso incendio de la calle Fray Esteban de la Villa, del barrio de San Pedro y San Felices. La primera en morir, en la misma habitación de la casa, fue Luna; horas después, moría Adrián en el Hospital Universitario.

Una metáfora perfecta, morir el mismo día, dos compañeros de viaje en la vida terrena y en el vida eterna para explicar la unión más allá de la vida de un hombre y su compañera inseparable.

Pero la realidad de lo ocurrido, toda la poesía del acontecimiento, los actos, los homenajes, las flores, los dibujos, los textos… los obituarios y hasta esta información, todos esos aderezos son el papel celofán en el que se envuelve la pequeñez de la vida, representada en Adrián y Luna.

A las diez y cuarto de la mañana de este miércoles, la capilla de San José será el marco del recuerdo y homenaje. Con la muerte de Adrián y Luna, el foco hay que ponerlo ahora en el tipo de sociedad que la humanidad, la tecnología, la política y sobretodo la economía está configurando y que el reflejo está en lo ocurrido en Burgos en apenas un mes y medio de diferencia.

Tres personas que vivían en la calle han muerto en diferentes circunstancias, Ángel, Luis, Adrián y Luna, ya descansan en paz; y la ciudadanía no se puede quedar sólo con el celofán que envuelve los acontecimiento.