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Imagen de archivo de una de las clases de cursos anteriores.
Burgos: El Programa de Envejecimiento Activo reduce su oferta a 820 plazas para adaptarse a la nueva normalidad

El Programa de Envejecimiento Activo reduce su oferta a 820 plazas para adaptarse a la nueva normalidad

El pasado curso ofertaron 2.050 plazas y para este se prevé ocupar 560

Gloria Díez

Burgos

Miércoles, 23 de septiembre 2020, 12:36

Uno de los programas que destaca la concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Burgos, Lola Ovejero, como eje estratégico de la acción del equipo de Gobierno, es el que engloba las actividades de envejecimiento activo, que este año se ha visto obligado a reducir ... sus plazas a 820 para adaptarse a la nueva normalidad.

Durante el curso anterior, la oferta se encontraba en 2.050, lo que supone una reducción de 1.230, siempre con el objetivo de garantizar la seguridad de los asistentes. «Esperamos acoger a 560 participantes», explica Ovejero, que reconoce que se han tenido que eliminar 19 actividades de la oferta por considerarse de riesgo como son, por ejemplo, pintura, acuarela, bailes, coro, etc.

En este sentido, confiesa que hay «miedo» entre algunas de las personas mayores que han participado en años anteriores. Sin embargo, la concejalía garantiza el cumplimiento del protocolo higiénico-sanitario con aulas que solo acogerán a nueve personas junto con el monitor, poniendo geles a disposición de los asistentes y formando a los participantes en el medio online de cara a continuar con los cursos de haber un posible confinamiento o cuarentena de algún asistente.

El programa recoge, además, actividades no presenciales para los mayores de 80 años, para quienes se han propuesto iniciativas de estimulación de la memoria y paseos en grupos reducidos de tres personas por sus barrios.

Desde la concejalía recuerdan los importantes beneficios para el bienestar mental, físico y emocional que aportan estas actividades para las personas mayores. La programación está dirigida a los mayores de 60 años que ya no se encuentran trabajando y primarán a la hora de aceptación de la inscripción aquellas personas empadronadas en Burgos.

Otra novedad, según señala Ovejero, es que el cobro de las tasas se efectuará a final de curso, por si el Ayuntamiento se viera obligado a suspender las actividades como ocurrió el año pasado debido al estallido de la pandemia. Por este motivo, de no poder desarrollarse el curso, no se cobrará a los usuarios.

El plazo para las inscripciones, que se pueden hacer de modo presencial, telemático o telefónico, estará abierto hasta el 1 de octubre y al día siguiente, en función de la demanda, realizará el sorteo de plazas. El curso comenzará el próximo 5 de octubre y finalizará el 18 de julio.

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