Una cuarta parte de los accidentes con víctimas en Burgos son atropellos y casi la mitad suceden en pasos de peatones

Unos datos que llevan a la reflexión, reconoce la concejal de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero, quien aboga por localizar los puntos negros de la ciudad para poder incrementar la presencia policial y, así, reducir el número de sucesos. La calle Vitoria y la Avenida del Cid Campeador son las que acumulan más atropellos, siete y cinco, respectivamente. Cinco también ha regristrado la calle Madrid.

Los sucesos se acumulan por calles, de tal modo que se registraron tres en Esteban Sáez Alvarado, Islas Canarias, Martín Cobos, Carretera Poza, San Agustín y San Francisco. Mientras, fueron dos en Santa Bárbara, Paseo de los Cubos, Buenavista, el Bulevar, Avenida Castilla y León, Islas Baleares, Condesa Mencía y Reyes Católicos. Y la mayor parte de los heridos, 42, tenían más de 60 años.

El número de atropellos supone una cuarta parte del total de accidentes de tráfico con víctimas registrados en Burgos durante el año pasado, que ascendiern a 433. Se registró un fallecido, el hombre que perdió la vida cuando circulaba con su moto en Castañares. Y 482 heridos leves y 47 heridos graves, con ligeros incrementos fruto del aumento de la siniestralidad general.

La vía con mayor número de accidentes es la calle Vitoria, con 158, seguida de la Avenida Cantabria, con 96. La Avenida del Cid y la Avenida Castilla y León registraron 84 y 83, respectivamente, y fueron 62 en Islas Baleares. Por debajo de cincuenta se encuentran la Glorieta Jorge Luis Borges, la calle Juan Ramón Jiménez, la calle Madrid o la calle San Francisco.

También ha habido accidentes en la Plaza Bilbao, la Avenida de Derechos Humanos, Islas Canarias, Farmacéutico Obdulio Fernández, la Avenida Cajacírculo, la Avenida del Arlanzón, Constitución Española, carretera Poza, Condesa Mencía, Legión Española, Esteban Sáez Alvarado, Servero Ochoa y Plaza del Rey. En estas se han acumulado entre 39 y 23 accidentes.

La mayor parte de los accidentes se producen por un choque contra otro vehículo estacionado, por embestiadas o alcances, y en muchos casos el exceso de velocidad es la causa principal. Así lo ha asegurado el Mayor de la Policía Local, Félix Ángel García, de ahí que cualquier medida que sirva para reducir la velocidad en las calles de Burgos supondrá, en la práctica, una reducción del número de accidentes.

Y por ese motivo, en Policía Local defienden la nueva Ordenanza de Movilidad, que bajará el límite de velocidad de 50 a 30 km/h en numerosas calles. Se trata de apostar por el «calmado del tráfico», insiste el intendente jefe, Fernando Sedano. Y por garantizar espacios seguros tanto para el peatón como para las bicicletas, así que «están segurístimos» de que las nuevas limitaciones funcionarán.

Sin embargo, primero habrá que testarla. La nueva Ordenanza de Movilidad es «un reto, desde el punto de vista operativo», reconoce Sedano. Exigirá de una adaptación y de un cambio de mentalidad entre los burgaleses. De ahí que Policía Local vaya a ser comprensivo con la puesta en marcha de la Ordenanza, que entrará en vigor una vez se publique en el boletín oficial de la provincia. Sin embargo, pasado el tiempo de adaptación también serán «contundentes» para exigir su cumpliento, ha afirmado.