La subida de la energía no encarece la factura del Ayuntamiento de Burgos al tener un precio blindado

Así lo reconoce el propio concejal responsable del área, Adolfo Díez, que explica que en el caso de la luz, se está pagando a Iberdrola, adjudicatario del contrato, «ocho o nueve céntimos el kilowatio» en función de las horas y los consumos. Esto es, «cuatro o cinco veces menos» de lo que cuesta hoy en día. Y algo muy parecido sucede con el contrato del gas, firmado en su día con Naturgy.

En ambos casos, el periodo ordinario de vigencia del contrato ya ha concluido. Si bien, en ambos casos hay posibilidad de prórroga de un año más a partir del mes de octubre. Y, como es lógico, el Ayuntamiento hará valer esa opción. «Iberdrola ya nos comunicó que no le interesaba, pero la ley es clara y tenemos el derecho de prorrogar el contrato de manera unilateral», explica Díez.

Eso permitirá al Consistorio seguir pagando la luz y el gas a un precio más que competitivo en el escenario actual durante, al menos, un tiempo. Se trata, sin duda, de un desahogo. No es para menos. Las cuentas son fáciles. El Ayuntamiento gasta unos 5 millones de euros cada año sólo en electricidad (sólo el alumbrado público supone un coste de unos 2,2 millones).

A este presupuesto se suman los 1,9 millones de euros de gasto derivado del gas, que se ha incrementado un poco a raíz de la covid, ya que ha sido necesario mantener más ventanas abiertas. En total, casi siete millones de euros que podrían haber sido 30 ó 35 si se pagase al precio actual. Es decir, alrededor de 15% del presupuesto total del Ayuntamiento. «Nos haría un roto increíble» que obligará a tomar medidas extraordinarias, resume Díez.

De momento, esa posibilidad se ha rechazado de plano. Veremos, en todo caso, en que condiciones se negocian los próximos contratos de suministros. «Tiene pinta de que el problema no se va a solucionar a medio plazo. Quizá nunca volvamos a ver la energía a los precios a los que la hemos conocido», señala.

Por eso, entre otras cuestiones, el Consistorio continúa desarrollando, en mayor o menor medida, acciones destinadas a reducir el consumo y mejorar la eficiencia energética de sus instalaciones. A este respecto, por ejemplo, ya se ha previsto incluir en la próxima modificación presupuestaria una partida destinada a la instalación de plazas fotovoltaicas en diferentes espacios municipales de la ciudad para contar con una potencia extraordinaria de hasta 600 kilowatios hora.

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