El nuevo mapa de líneas ha pasado de un apoyo unánime de la corporación municipal a aprobarse solo con los votos del PSOE y Ciudadanos. Se han incorporado una serie de cambios que, a juicio del Partido Popular, harán que la nueva red de autobuses ... urbanos sea más ineficaz, sin incrementar frecuencias ni dar salida a las necesidades de los centros tractores de la ciudad como son el Hospital Universitario de Burgos y la Universidad. Y, además, sumará un coste anual de 620.000 euros.
Publicidad
Jorge Berzosa explica que los cuatro cambios incorporados no son modificaciones menores, pues afectan a un total de ocho líneas de un mapa que se aprobó en 2019 sin ningún voto en contra. Ahora, sin embargo, los cambios se han tramitado «con nocturnidad y alevosía», sin consultar con los vecinos, ni con los distritos, amparándose en un informe de la Universidad de Burgos que contiene «errores» y sin contar ni siquiera con el apoyo de la gerente del Samyt, «que no los ha firmado».
Noticia Relacionada
Más información
Así, el concejal del PP afirma que el nuevo mapa que se implantará el 1 de enero sera «ineficaz» y pone algunos ejemplos. La unificación de las líneas 2 y 12 supone que la zona sur pasará de tener, en hora punta, un autobús cada quince minutos a mantener el servicio cada 30 minutos. En el caso de la UBU, seguirá habiendo dos líneas cada hora y vente y una cada 40 minutos, y no un bus al centro cada 10 minutos como se incluía en el mapa aprobado el pasado año.
Y si hablamos del HUBU, se reducirá el número de buses que actualmente llegan al centro hospitalario. «Es inexplicable», afirma Jorge Berzosa, quien acusa al equipo de Gobierno del PSOE de «cobardía». Les ha faltado valentía, insiste, para defender el mapa de líneas frente a los conductores y otros grupos de presión, pues con los cambios solo se consiguen beneficios para los conductores: líneas más cómodas, más descansos y más tiempo en las paradas.
Además, el nuevo mapa de líneas supondrá incrementar el coste anual en 620.000 euros, pues los 12 conductores contratados costarán 500.000 euros al año y para poner en marcha la línea circular se requiere de otros cuatro, que sumarán otros 120.000 euros. Por todo ello, el PP votó este martes en contra de los cambios y la implantación de la nueva red de autobuses urbanos y, en los próximos días, iniciarán una campaña para informar a los ciudadanos, a través de los distritos y las asociaciones de vecinos.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.