Arrancan las obras de construcción del carril bici de la calle Vitoria

Se trata de una de las grandes apuestas en materia de movilidad impulsadas por el anterior Ejecutivo que, sin embargo, se fue dilatando en el tiempo. De hecho, el propio diseño del carril bici, de casi un kilómetro de longitud, generó cierta polémica, por cuanto suponía la modificación sustancial de parte de la estructura de la calle Vitoria, abocada a perder algunas plazas de aparcamiento y uno de los carriles de circulación en su tramo más cercano a la plaza del Cid.

Finalmente, el proyecto consiguió ver la luz durante el pasado mandato. De hecho, la Mesa de Contratación del Ayuntamiento propuso a finales de mayo la adjudicación a Jacinto Lázaro, que presentó una oferta de 959.179 euros, lo que suponía una rebaja sustancial respecto al presupuesto base de licitación, que se elevaba a los 1.175.000 euros.

En aquel momento, el Ejecutivo local estaba en funciones, por lo que la aprobación definitiva de esa adjudicación y la firma del correspondiente contrato quedó ya en manos del nuevo equipo de Gobierno. Y lo cierto es que la entrada del bipartito puso en duda el desarrollo del proyecto, que semanas después recibió el respaldo del Ministerio a través de la concesión de una ayuda de más de 800.000 euros vinculada a los fondos europeos.

A la vista de todo ello, el bipartito, que durante las primeras semanas de mandato paralizó varios proyectos impulsados por el PSOE, decidió seguir adelante con el carril bici de la calle Vitoria y la Junta de Gobierno dio luz verde definitiva semanas atrás.

Una vez dado el impulso definitivo, la empresa cuenta con un plazo de ejecución de seis meses para desarrollar un carril bici que cambiará buena parte de la fisionomía del entorno. Dicho carril bici partirá desde el cruce con la calle Maestro Justo del Río, entre el Hotel Puerta de Burgos y la Subdelegación de Defensa.

En ese punto entroncará con el carril bici que atraviesa la propia calle Vitoria y discurrirá por el carril derecho de la calzada hasta la Avenida de Cantabria. Una vez alcanzado ese punto, el carril bici se desviará hacia el lazo izquierdo de la circulación hasta alcanzar la calle Puente Gasset. Allí se desviará precisamente hacia el río sin alcanzar la Plaza del Cid.

A grandes rasgos, el nuevo carril bici repetirá el diseño y concepción de los últimos tramos ejecutados en Burgos, como el de Reyes Católicos. Esto es, será un carril exclusivo a cota de calzada y separado tanto de las zonas peatonales como del tráfico. En este sentido, su construcción supondrá la supresión de varias decenas de plazas de aparcamiento en el lazo izquierdo de la calle, ya que las plazas pasarán a ser en línea.