Los ciclocarriles fracasan en Burgos y los ciclistas apuestan por carriles bici

Casi tres años después de que se empezaran a señalizar, «los ciclocarriles no han dado el fruto deseado», afirma Pedro Mediavilla, de Burgos con Bici. Muchos ciclistas no los usan porque no se sienten seguros, primero porque no se respetan los límites de velocidad, y segundo porque al lado pasan los coches a grandes velocidades.

Por ese motivo, el colectivo afirma que, «en caso de necesidad», en las vías de gran afluencia de tráfico se debe apostar por los carriles bici en lugar de por las ciclocalles. Y carriles bici con todas las medidas de seguridad: a cota calzada, segregados y delimitados para que no se vean afectados ni por la circulación ni por los aparcamientos.

El modelo implementado en la Avenida del Arlanzón, junto a El Plantío, o en el carril bici que se construye en Reyes Católicos. En Burgos con Bici están contentos de que, después de más de viente años, se haya atendido sus demandas. Eso sí, hasta que no ven completado este último carril, y comprueben cómo se hacen las conexiones, no respirarán tranquilos.

También seguirá ese modelo el futuro carril bici de la calle Vitoria, aunque este proyecto se queda corto, pues conectará la Plaza del Rey con la calle Puente Gasset, sin llegar a la Plaza del Cid. «Se dejan las cosas a medias» pues lo lógico habría sido una conexión desde el polígono hasta El Cid, toda una línea recta en la calle Vitoria.

Pedro Mediavilla ha explicado que, si bien los ciclocarriles no han acabado de funcionar, sí están satisfechos con las ciclocalles, y valoran que se sigan identificando nuevas como la que une Fernán González con Fuentecillas, pasando por el arco de San Martín y Francisco Salinas. En la peatonalización también se ha tenido en cuenta al ciclista.

En lo que ha pinchado el Ayuntamiento de Burgos es en la señalización de los itinerarios ciclistas en el centro histórico. Ya que la Ordenanza de Movilidad limita a una serie de calles la posibilidad de que circulen las bicicletas, Burgos con Bici reclama que se señalicen. De lo contrario, la propia ordenanza recoge que no son válidas.

También que se coloque en las señales de prohibido el paso la excepción de bicis. Ahora hay calles del centro histórico por las que se supone que pueden ir los ciclistas en ambos sentidos pero, si no se cambia la señalización, entrar en sentido contrario es una infracción. Mediavilla recuerda que han pasado ya tres años desde que se aprobara la nueva ordenanza y las señales siguen sin ponerse.