«En 2023 en los tejados españoles hubo más potencia acumulada que en el parque nuclear nacional»

A pesar de este 'sorpasso', el 2023 no ha sido un buen año para el autoconsumo en España. «Venimos de 2022 que fue un año excepcional y extraordinario», apuntó González Moya. En los últimos doce meses, la potencia instalada de autoconsumo fotovoltaico alcanzó los 1,9 GW, muy lejos de los 2,65 de 2022 (-25%). A pesar de la caída, APPA lo considera «un buen dato» y achacan el recorte a la desaparición de los altos precios del mercado eléctrico y de los fondos europeos. «El mercado se está estabilizando», añadió Macías. «Si miramos toda la serie histórica, 2023 es el único año con una caída».

Según el informe anual de APPA Autoconsumo, los vientos de cola que impulsaron estas instalaciones en 2022 han desaparecido. «Fue un año muy favorable para el autoconsumo en nuestro país», destaca el texto. El recorte más pronunciado se produjo en los hogares con una caída del 50% en comparación con las industriales que sólo fue un 4%.

Según APPA, en 2023 se realizaron más de 127.000 nuevas instalaciones, el 88% residenciales (111.795 viviendas) y el 12% industriales (15.509 empresas), con una inversión conjunta de 1.863 millones de euros. «Contamos con cerca de medio millón de instalaciones de autoconsumo en España, medio millón de apóstoles de una nueva forma de generar y consumir energía», apostilló Macías.

El tamaño medio de los proyectos residenciales «apenas ha variado en 2023», destaca el informe de APPA Autoconsumo. Sin embargo, en el apartado industrial ha pasado de los 70 kW a los 90 kW en el pasado ejercicio. «Esto demuestra una tendencia creciente de las empresas españolas a asegurar su consumo energético», señala el informe anual.

Así, el autoconsumo generó 7.262 GWh en 2023 o lo que es lo mismo un 3% de la demanda nacional, según datos de esta organización. «Aunque las estadísticas oficiales consideran el autoconsumo como una disminución de la demanda eléctrica del sistema, al comparar la generación con el consumo, podemos calcular cuál es la electricidad generada equivalente», explica APPA. «Parece una cifra modesta, pero es superior a otras tecnologías más consolidadas como el carbón, la solar termoeléctrica o bioenergía», añaden.

Una cifra que podría ascender a 8.903 GWh, ya que 1.642 GWh se pierden al no ser aprovechados por el sistema. Una pérdida que APPA cifra en 405 millones de euros en 2023. «No aprovechamos toda la energía que nos da el sol», denunció González Moya. «El problema viene del ámbito regulatorio», añadió.

A pesar de la caída de los datos, la asociación es optimista con el cumplimiento de los datos marcados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Según el último borrador, la cifra de autoconsumo pasa de 6 GW a 19 GW de autoconsumo solar en toda España para el año 2030. «Necesitamos 1,6 GW al año y actualmente estamos por encima de la senda», reveló González Moya. «Además, la electrificación de la movilidad también va a ayudar a ello», añadió.

Las predicciones del sector es que para 2024 se realicen más de 6 millones de instalaciones de tecnologías verdes en Europa: 2 millones de paneles solares, 1 millón de calentadores, 0,5 instalaciones de baterías y la adquisición de 2,5 millones de vehículos eléctricos.«En la medida en la que se empiece a intervenir trasladando el coste al cliente como en 2022, este ritmo se puede ver desacelerado. Pero en la medida que empecemos a intervenir en el mercado se podrá frenar o aumentar, si se aplican las políticas necesarias para llegar a tiempo a este objetivo», advirtió Iñigo Amoribieta, director de Otovo.

No obstante, el sector ve un peligro en los próximos años para la consecución de los objetivos marcados por Bruselas y también por La Moncloa. «El 2024 será un año crucial en el que los gobiernos deben apostar por la transición energética», apuntó Amoribieta. «Lo más importante es que no se traslade el verdadero coste de la generación de electricidad al cliente. Es decir, que las medidas emitidas por el gobierno para protegernos no se trasladen al pago de impuestos entre otras cosas, pues de este modo, lo que consiguen es frenar la inversión distribuida, fácil y altamente rentable para las familias», apostilló.