Sardina con montera en brioche

En esa herencia se inspira para recomendar un bocado humilde y tabernario «que no deja indiferente a nadie»: la sardina con montera. «Es un aperitivo muy típico, que solo he probado en La Rioja», aunque por la sencillez de los ingredientes, quizá pueda encontrarse en otros lugares. Sardina en conserva y guindilla riojana, «más grande y de un verde más intenso que las piparras vascas», montada sobre una rebanada de pan sobao de La Rioja, «un pan con denominación de origen que empapa muy bien todo el aceitito de la sardina».

Francis menciona un bar de Logroño, el Gil, cuyo emblema es la sardina con montera. Y en Ezcaray, su pueblo, es la especialidad del histórico Satorre, en la plaza del Quiosco.

El éxito de la receta, sencillísima, descansa sobre todo en la calidad de los productos, pero a él le gusta darle una vuelta de tuerca. «En lugar del pan sobao usamos un pan más liviano pero que también empape bien el aceite, puede ser una focaccia o un brioche, que tostamos levemente en el horno o en la plancha». Un detalle, corta la guindilla en tres, «para asegurarnos de que en cada mordida tenemos todos los elementos». El resultado es un aperitivo sabroso y picante, pero con un contraste dulce, que grita Rioja a cada bocado.