Ojo que circular así le puede costar una multa

«Conducir descalzo, con tacones o en chanclas puede ser motivo de sanción. En concreto, constituye una infracción leve y se traduce en una multa de 80 euros,», advierte Paola Santos. Aunque no está tipificado como tal en el Reglamento General de Circulación, llevar chanclas «puede interferir en el control del vehículo» y, por tanto, motivar una sanción al no respetarse los artículos 17.1 («Los conductores deberán estar en todo momento en condiciones de controlar sus vehículos…») y 18.1 («El conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos...»). En su página web la DGT insiste con el asunto: «Chanclas y tacones excesivos no es que estén prohibidos, como tal, pero sí son peligrosos para conducir, ya que el pie puede resbalar o el tacón engancharse».

«Salimos de la playa y nos metemos al coche sin camiseta. Es verano, estamos relajados y no somos conscientes de que ese gesto podría ser motivo de sanción al poder llegar a ser causante de quemaduras o rozaduras en caso de sufrir un accidente por la actuación del cinturón de seguridad o de un airbag», advierte la especialista. Circular con la pechera al aire, prosigue, «supone el incumplimiento del artículo 3.1 que obliga a conducir «con la diligencia y precaución necesarias para evitar todo daño, propio o ajeno». Es más, ir al volante sin camiseta podría interpretarse por el agente «como una causa de merma de la capacidad de movimiento por el contacto de la piel con el asiento» e, incluso, «podría ser motivo también de sanción si el agente considera que puede llegar a distraer al resto de vehículos e incrementar el riesgo de accidente». En cualquiera de los casos anteriores hablamos de una infracción leve castigada con el pago de 80 euros.

En verano, es muy habitual sacar el brazo por la ventanilla y apoyarlo en el marco de la ventana. Mal hecho. «El artículo 18 del Código de Circulación exige que todos los ocupantes del vehículo mantengan una posición adecuada durante los trayectos». Y llevar el brazo fuera podría castigarse con 80 euros. «Cuando te enseñan a conducir te dicen que ambas manos deben ir apoyadas en el volante y así debemos hacerlo siempre. Porque es evidente que si damos un volantazo nuestra capacidad de reacción no es la misma si solo utilizamos una mano», insiste Paola Santos. Y recuerda que todas estas multas se reducen al 50% (40 euros) en caso de pronto pago.

La Dirección General de Tráfico prevé 91,2 millones de desplazamientos durante estos meses de julio y agosto, una movilidad similar a la campaña del verano de 2019, además de «un incremento muy significativo de las salidas de fin de semana y de los desplazamientos de corta duración».